Fiscal pidió que ex presidente de Barcelona siga en prisión por riesgo de fuga
Sandro Rosell es acusado de blanquear dinero de la Confederación Brasileña de Fútbol.
Sandro Rosell fue detenido el 23 de mayo.
El fiscal Vicente González Mota pidió en una audiencia que se mantenga en prisión provisional al ex presidente de FC Barcelona Sandro Rosell por blanquear dinero de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), alegando que existe riesgo de fuga, un argumento que rechazó su defensa.
Este jueves se revisó ante la sección tercera de la Audiencia Nacional el recurso que interpuso el abogado de Rosell, Pau Molins, contra su ingreso en prisión el 25 de mayo por orden de la juez Carmen Lamela, imputado por blanquear en Andorra unos siete millones de euros de la venta de derechos audiovisuales de 24 amistosos de la selección brasileña de fútbol.
Según informaron a EFE fuentes jurídicas, el fiscal González Mota expuso los mismos argumentos que ya alegó en su escrito rechazando la libertad de Rosell, en el sentido de que hay riesgo de que se fugue porque no tiene un especial arraigo en España, ya que mucha de su actividad laboral es en el extranjero, viaja de forma habitual y parte de sus bienes están fuera del país.
El fiscal apuntó ante el tribunal que Rosell habría delinquido al suscribir un contrato, a espaldas de la CBF, para desviar a Andorra los fondos que cobró por sus labores de intermediación.
El abogado del ex presidente del "Barça", Pau Molins, defendió por su parte que los pagos a Rosell son legales y responden a remuneraciones por intermediación en márketing deportivo, una labor que hizo ganar dinero a la CBF.
Molins afirmó durante la audiencia que no hay riesgo de fuga puesto que tiene mucho arraigo en España y que su defendido no cometió delito de blanqueo alguno porque el dinero que supuestamente lavó no provenía de delitos de corrupción.
Según informaron fuentes de la defensa, el letrado aportó el miércoles un documento para intentar probar que los fondos que Rosell obtuvo de la CBF no pueden proceder de un delito de corrupción pública porque dicha entidad es privada.
En dicho documento, firmado por el secretario general de la CBF, Walter Feldman, se afirma que esta entidad es privada y no recibe fondos públicos, y se añade que, aunque desconoce los hechos por los que se está investigando a Rosell en España, no se considera perjudicada por esos pagos.