Trabajadores de casinos: La violencia y las amenazas son pan de cada día
"Es una realidad que pasa a nivel industria", dijo a Cooperativa el dirigente Víctor Guinao, de la Federación de Sindicatos.
Danilo Ortiz, del Sindicato de Monticello, alertó sobre una "escalada de violencia de los clientes".
Los trabajadores de Monticello dicen haber pedido detector de metales. "No es el espíritu de un casino de juegos y es antiestéstico", les respondieron.
El presidente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores de Casinos de Juegos, Víctor Guinao, sostuvo en Cooperativa que la violencia y las amenazas por parte de clientes son "tema de todos los días" y un problemática a nivel nacional en este tipo de establecimientos.
El domingo último Osvaldo Campos protagonizó una balacera en el Casino Monticello y mató a dos trabajadores, mientras hace sólo un mes Stiven Mi Abuamsha realizó disparos hiriendo a un guardia. Tras ello diversos sindicatos del rubro denunciaron maltratos de clientes y situaciones de inseguridad y pidieron tomar medidas para evitar que se repitan casos similares.
"Ésta no es una problemática sólo de Monticello, es un tema a nivel nacional", dijo Guinao a Una Nueva Mañana.
La violencia y las amenazas, por parte de los clientes, "es un pan de cada día de los trabajadores, es un tema de todos los días".
"Hay clientes que por jugar 100 mil, 200 mil pesos, se creen con la potestad de tratar como quieran a los trabajadores, y lamentablemente, con la poca seguridad que tenemos, el carácter de algunas jefaturas que no son capaces de cortar el juego a este tipo de clientes, porque quieren cumplir metas, hay una problemática que no se ha logrado visualizar por el empresario", reflexionó el dirigente.
"Esto, la violencia en los casinos, es una realidad que pasa a nivel industria (...) La industria, por un tema de reducir algún tipo de costo, está trabajando con el mínimo que le exige la ley en el tema seguridad", y "hoy se está trabajando con el mínimo de dotación que exige la ley", denunció.
"Un casino saca lo peor de las personas"
El director del Sindicato de Trabajadores Monticello, Danilo Ortiz, recordó en Una Nueva Mañana que el domingo, cuando Osvaldo Campos disparó en la sala de juegos del recinto y mató a dos empleados, un guardia de seguridad ese día prohibió "a los trabajadores que eran evacuados que hablaran, porque 'no podían', simplemente".
Ortiz indicó que el recinto "sólo hace dinero" y que la situación de los funcionarios "ahora detona en un episodio que no debió haber ocurrido".
"Yo trabajo en el área de las mesas de juegos desde el día uno, y siempre vimos esta escalada de violencia de los clientes, porque un casino saca lo peor de las personas y, a la vez, cuando ganan sacan lo mejor", declaró.
"Desde el día uno hemos exigido mayor seguridad y siempre hay medidas parche, (sólo) palabras, (facilitando los hechos) que desencadenaron en esto. El detector de metales ya había sido solicitado por las instancias que corresponden, se solicitó a raíz del incidente grave hace un mes, y la respuesta fue poco afortunada. Fue decir: 'No es el espíritu de un casino de juegos y es antiestéstico', ésa fue la respuesta de la empresa", remató el dirigente.
A su vez, el presidente del Sindicato de Trabajadores de Enjoy, Jorge García, manifestó que "el cliente con muchas lucas se siente a sus anchas en los casinos, cree que por tener un poco más de lucas puede denigrar a un trabajador".
Sindicato pide al Gobierno mayores exigencias a empresa
Durante la jornada de este miércoles, el Sindicato de Trabajadores del Casino Monticello llegó hasta el Ministerio del Trabajo, donde le pidieron a la ministra Alejandra Krauss mayores exigencias para la empresa.
El presidente del sindicato, Guillermo Candia, dijo que la sala de juego no está preparada para volver a funcionar y detalló que "los trabajadores, a menudo, presenciaban estos hechos, especialmente en el área que fue la más afectada los que trabajan en las mesas de juegos, los croupiers".
"Ellos muchas veces se veían enfrentados a que algunos clientes hacían ostentación de sus armas de fuego tal vez deslizando un poco el vestón o la chaqueta que estuvieran utilizando. ¿Con qué ánimo? Intimidar, tal vez. No creo que esté totalmente garantizada la seguridad para ellos para poder volver", reconoció.
En paralelo, un grupo de parlamentarios, entre ellos los PPD Ramón Farías y Tucapel Jiménez, le exigieron al Gobierno poner urgencia al proyecto que crea el registro nacional de ludópatas.
La iniciativa está en la Comisión de Hacienda del Senado y el diputado Farías llamó a que el Gobierno le ponga suma urgencia "para que sea aprobado ojalá dentro de esta semana. No es un proyecto complejo, establece que debe existir un registro de ludópatas sancionado por un juez, a fin de que se les impida legalmente la entrada a los casinos".
"Como hay agresiones sexuales, hay acoso laboral permanente por parte de estas personas que sufren ludopatía, que están enfermas", agregó el parlamentario PPD.
Cabe recordar que lo único que existe actualmente es que las personas pueden autoexpulsarse, es decir, pedir a un determinado casino que no lo dejen entrar, pero el registro no es unificado y las cadenas no tienen facultades para prohibir el ingreso de alguien de acuerdo a su conducta anterior.
El Casino Monticello sigue cerrado hasta no contar con medidas mínimas de seguridad y recién este viernes la Dirección del Trabaja evaluará su reapertura.