Estado Islámico decapitó a 15 de sus combatientes en el este de Afganistán
Estiman que la causa de esto es una disputa interna en la provincia de Nangarhar.
Los yihadistas en la zona se han reducido de varios miles a apenas medio millar.
El número de yihadistas en Afganistán se ha reducido notoriamente.
El grupo yihadista Estado Islámico (EI) decapitó a 15 de sus combatientes por una disputa interna en la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán, informaron a EFE fuentes oficiales provinciales.
Las decapitaciones tuvieron lugar ayer miércoles por la tarde en el distrito de Achin, considerado el bastión de la formación en el país y donde hace meses surgieron una serie de disputas entre facciones que todavía continúan, dijo el portavoz del gobernador provincial, Attaullah Khogyanai.
"Algunos de ellos ya han comenzado a matarse unos a otros", detalló la fuente.
El portavoz del Ministerio de Defensa afgano, Dawlat Waziri, confirmó la decapitación de los yihadistas y achacó los problemas internos de la formación a la creciente presión interpuesta por las fuerzas de seguridad con sus operaciones en la zona.
"No tienen bases permanentes en las aldeas y han huido a las montañas vecinas, desde donde lanzan a veces sus ataques de guerrillas y vuelven a huir", explicó Waziri.
Según apuntó, el número de yihadistas del EI presentes en Nangarhar se ha reducido de varios miles a apenas medio millar con las continuas ofensivas aéreas y terrestres de las tropas afganas e internacionales.
El Estado Islámico irrumpió en Afganistán en 2015 en diferentes puntos del país y creó su principal bastión en Nangarhar, fronteriza con Pakistán y clave en las comunicaciones entre los dos países.
Desde entonces y, aunque las autoridades han afirmado en diversas ocasiones que han reducido su presencia a unas pocas zonas remotas, la formación yihadista ha reclamado algunos de los atentados más sangrientos en el país.