Ocho años de presidio efectivo para conductor ebrio que causó lesiones gravísimas a joven en Hornitos
La alcoholemia arrojo que conducía con 1,60 gramos por litro de de sangre.
Por los delitos de conducción de vehículo motorizado en estado de ebriedad causando lesiones gravísimas y no prestar auxilio a la víctima ni dar cuenta a la autoridad correspondiente, el Tribunal Oral en lo Penal de Antofagasta condenó este miércoles a Sebastián Acuña, de 25 años, a cumplir una pena de ocho años y un día de presidio efectivo.
Además se decretó que el responsable del accidente deberá pagar una multa de 26 UTM (1.235.988 pesos) y se le impuso la inhabilidad absoluta perpetua para conducir vehículos de tracción mecánica y el decomiso del vehículo con el que provocó el atropello.
El atropello se produjo antes del mediodía del 1 de enero del año 2017, en el balneario de Hornitos, a kilometros de Mejillones, en la Región de Antofagasta, cuando un grupo de amigos debió esquivar a un vehículo que se desplazaba a gran velocidad por la vereda con peligro de atropellarlos. El conductor al llegar al final de la huella se devolvió a gran velocidad en sentido contrario.
Al llegar al lugar donde de encontraba la víctima y otras personas, Acuña los embistió y luego huyó.
Carabineros del retén ubicado en el balneario logró la ubicación del conductor y corroboró que se encontraba en manifiesto estado de ebriedad: la alcoholemia arrojó 1,60 gramos de alcohol en la sangre.
La víctima, de 22 años, resultó con varias lesiones y fracturas, que le dejaron secuelas de carácter permanente o de larga duración, de grado tal que ha determinado su incapacidad para el trabajo y dependencia de terceros para actividades de la vida diaria.
Luego del juicio Acuña pidio disculpas a la víctima y su familia, señalando estar arrepentido de lo sucedido y del daño causado.