Asociación de Fútbol Palestina condena amistoso entre Argentina e Israel
El duelo se llevará a cabo en Jerusalén Este.
La Asociación de Fútbol Palestina condenó que se dispute el próximo 9 de junio un partido amistoso en Jerusalén entre la selección argentina y la israelí, porque considera que es un apoyo para "normalizar" la ocupación de Jerusalén Este.
"Como se aclaró, el campo originario para el partido era Haifa. Sin embargo, y tras presión política por parte del Gobierno israelí, como dijo abiertamente la ministra de Cultura y Deportes, Miri Reguev, el partido se trasladó a Jerusalén", explica el presidente de la asociación palestina, Yibril Rajub, en una carta dirigida a su homólogo argentino, Claudio Tapia, a la que tuvo acceso EFE.
"Es una decisión que, dado el contexto actual, la Asociación de Fútbol palestina rechaza y condena", expuso, en referencia a los recientes traslados de las embajadas de EE.UU., Guatemala y Paraguay a Jerusalén, rompiendo el consenso internacional histórico de no reconocer soberanía sobre la ciudad hasta que palestinos e israelíes no alcancen un acuerdo de paz.
En un primer momento se valoró que el amistoso se celebrase en el estadio "Sami Ofer" de Haifa, pero después de "una intensa presión política", según recogieron medios israelíes, se decidió que el se dispute en el "Tedy Kollek" de Jerusalén, ya que Reguev resolvió que la urbe, cuya parte este está ocupada por Israel desde 1967, es el lugar idóneo para el encuentro.
"No puede ser que el equipo argentino venga al país y no se haga en Jerusalén", señaló la ministra. "Después de todo, Messi viene a rezar al Muro de las Lamentaciones", situado en la ciudad vieja ocupada de la urbe.
El presidente de la Asociación palestina criticó al Gobierno israelí por "transformar un partido regular en una herramienta política", alegando que el encuentro "se juega ahora para celebrar el 70 aniversario del Estado de Israel" y "en un estadio construido sobre uno de las 418 pueblos palestinos destruidos por Israel hace 70 años, Al Malha".
Rajub lamentó que al jugar allí, "la Asociación de Fútbol israelí está siendo usada una vez más como una herramienta política del gobierno israelí para normalizar la anexión ilegal del ocupado Jerusalén Este".
"Argentina y otros tantos países latinoamericanos saben muy bien cómo el fútbol fue usado por sus respectivas dictaduras militares para blanquear sus graves y sistemáticas violaciones de los derechos humanos. Habríamos esperado que aprender del pasado, junto a las regulaciones de la FIFA, hubiera hecho que esto no se repitiera", apunta Rajub en la carta, en la que desea que la selección dé marcha atrás en la decisión.