Gobierno peruano confirmó ataque terrorista que dejó cuatro policías muertos

Cuatro policías muertos dejó un ataque terrorista que se produjo en la zona de Huancavelica, en el sur de Perú.

Según informaron medios locales, una patrulla de policías sufrió un ataque con explosivos cuando se desplazaba por una carretera rural en la zona del distrito de Anco.

Otra patrulla policial que llegó en apoyo de los emboscados también fue atacada por los subversivos, lo que llevó a que las fuerzas de seguridad envíen mayores refuerzos e inicien una persecución para intentar capturar a los responsables.

El presidente de Perú, Martín Vizcarra, confirmó los decesos a través de sus redes sociales.

"Cuatro heroicos policías han entregado su vida en el cumplimiento de su deber", señaló Vizcarra en un mensaje publicado en su cuenta en la red social Twitter.

El gobernante agregó que "los enemigos del Perú no doblegarán nunca nuestra lucha contra el terrorismo y su vil alianza con el narcotráfico. Este crimen no quedará impune. ¡Los erradicaremos con la fuerza de la ley!".

En tanto, el Ministerio del Interior señaló, también en Twitter, que el ministro Mauro Medina condenó "el cobarde atentado cometido hoy contra cuatro suboficiales" de la Policía Nacional del Perú.

"Expreso mis condolencias y solidaridad con las familias de las víctimas. Este acto criminal no quedará impune", enfatizó Medina.

El experto en temas de seguridad Pedro Yaranga declaró al diario peruano El Comercio que el ataque se realizó en una zona que "ya tiene muchos años pacificada" y que los subversivos "han salido de su zona habitual para dar un golpe y llevarse el armamento de los agentes".

Yaranga aseguró que los atacantes pertenecen al clan de los Quispe Palomino, un grupo disidente de Sendero Luminoso que se mantiene en armas, y que "la emboscada la han estado estudiando y planeando desde hace buen tiempo".

El analista agregó, en un mensaje en su cuenta en Twitter, que "en el lugar de la emboscada los terroristas, tras asesinar a los policías, dejaron propaganda" subversiva.

El lugar del ataque forma parte del Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), una amplia zona selvática en el centro y sur del país por donde se desplazan remanentes de Sendero Luminoso en alianza con el narcotráfico, según las autoridades.