La columna de Manfred Schwager: La hora de los grandes

El periodista de Al Aire Libre en Cooperativa comenta los próximos desafíos de la selección adulta de baloncesto.

Por Manfred Schwager

Ganar uno de los dos partidos que vienen. Eso es lo que necesita la selección masculina adulta de baloncesto para asegurar su paso a la siguiente ronda en las clasificatorias al Mundial de China. Dos duelos que la escuadra nacional enfrentará de local, esta vez en el Coliseo "Antonio Azurmendy" de Valdivia.

El primero de estos encuentros será el viernes 29, enfrentando a Colombia que marcha última en este grupo. La escuadra que dirige Claudio Jorquera obtuvo frente a ellos el único triunfo que registra en el proceso eliminatorio, un estrecho 74-69 en que un muy buen primer cuarto de los chilenos sostuvo el marcador en Medellín.

Aunque en el papel aparece como el rival más débil y sólo acumula derrotas en esta zona, la escuadra colombiana cuenta con jugadores experimentados como Michaell Jackson, Stalin Ortiz y Jhon Hernández, y con jóvenes que actúan en Estados Unidos como Hansel Atencia y Jhan Mejía. El seleccionador Guillermo Moreno Rumié, una leyenda del deporte en su país, nominó un buen plantel que es capaz de complicar las opciones de Chile en este primer partido.

De hecho, el mismo entrenador lideró al representativo de su país en los Juegos Sudamericanos de Cochabamba, donde la escuadra chilena se impuso por 64 a 63 en un duelo donde hubo nueve de los doce convocados por Moreno para esta doble fecha clasificatoria. Si bien sólo dos de los actuales nominados chilenos (Franco Morales e Ignacio Carrión) estuvieron en Bolivia, el partido sirve como otro antecedente del nivel similar entre ambos equipos y la necesidad de cuidar los detalles en el partido clave de esta doble fecha.

El último duelo en esta fase se jugará el lunes 2 de julio frente a Venezuela. Dirigidos por el argentino Fernando Duró, marchan en la segunda ubicación del Grupo B con tres triunfos y una derrota, y llegarán al último partido en Valdivia luego de enfrentar a Brasil en casa.

El base Gregory "súper ratón" Pérez, que acaba de dejar el Fuenlabrada de España para reforzar al Guaros de Lara de su país, es el estandarte de esta selección que le sacó 21 puntos de diferencia a Chile en el primer partido, y que también tiene a tres jugadores actuando en Argentina y uno en México entre sus 16 preconvocados. Además, hay otros seis basquetbolistas que militan en Guaros, cuadro que entre 2016 y 2017 ganó una Liga Sudamericana y dos Ligas de las Américas a nivel de clubes, en un testimonio del buen nivel del baloncesto venezolano en Sudamérica.

Por eso es fundamental que la escuadra chilena se quede con el triunfo en el primero de estos partidos. Que impongan sus términos y lleguen sin contratiempos a la victoria. No sólo para asegurar el paso a la siguiente fase, sino además para enfrentar lo que viene (Venezuela y las próximas tres ventanas de partidos) con tranquilidad y confianza, cualidades que permitan seguir construyendo el futuro del baloncesto chileno de la mejor manera para el mediano y el largo plazo.