Sindicato de Actores de Chile tomó acciones concretas tras acusaciones de abusos sexuales contra Abreu y López
El presidente de Sidarte, Ignacio Achurra, resaltó a Cooperativa las medidas que detonaron las denuncias.
La de Netflix no es la única reacción que provocaron las denuncias de abusos sexuales en el mundo del espectáculo nacional.
De hecho, tras las acusaciones contra Herval Abreu, en el Sindicato de Actores de Chile (Sidarte) abrió un canal de denuncias y con lo de Nicolás López reforzaron estos protocolos con más medidas concretas.
La jornada del sábado, el colectivo entregó su apoyo a las afectadas y recalcó su "irrestricto compromiso con la causa feminista".
Frente a nuevas y gravísimas acusaciones públicas, esta vez contra el director de cine Nicolás López, @sidarte_chile reafirma su irrestricto compromiso con la causa feminista. Recuerden: denuncias@sidarte.cl #EstamosTrabajando
— Sidarte (@sidarte_chile) 30 de junio de 2018
En tanto, este domingo, el presidente de Sidarte, Ignacio Achurra, comentó a Cooperativa que "nosotros estamos dolidos, afectados, nos provoca mucha pena y también mucha rabia, porque entendemos también que detrás de estos casos lo que hay es un abuso de las condiciones de precariedad laboral en las que se desempeña la mayoría de nuestros colegas actores y actrices".
"Las acciones concretas que hemos tomado hasta el momento es que tenemos un convenio con la Corporación de Desarrollo de la Mujer La Morada y hemos abierto un canal de acogidad de denuncias, denuncias@sidarte.cl, que tienen como objetivo dar un primer espacio de contención acogida y apoyo sicológico, amparado por el secreto profesional de este equipo de sicólogas de excelencia que trabaja en la corporación", complementó.
A lo que se suma que "hemos puesto a disposición de las denunciantes nuestros equipos legales. Si hay compañeras, colegas, estudiantes, trabajadoras, del teatro que quieran denunciar en la Justicia y que necesiten guía, acompañamiento, apoyo".
A las voces denunciantes reveladas por la revista Sábado, se sumó también una amiga de López: Cristina Peña y Lillo, quien aseguró que en una oportunidad el director se le tiró encima e intentó besarla. Junto con ello aseguró que fue "testigo de sus bromas machistas, de sus burlas. Era desagradable. Joteaba a todas buscando alguna oportunidad".