Vaticanista: Para atajar abusos se necesitan mujeres en la formación de los sacerdotes
La intelectual italiana y coordinadora de suplemento femenino del "L'Osservatore Romano", Lucetta Scaraffia, pidió "un cambio radical" en la Iglesia.
Al papa Francisco, le pide que "escuche a las mujeres".
El problema es que "no están acostumbrados a tener a mujeres al lado. Es que ni lo piensan", añade Scaraffia.
La intelectual italiana y coordinadora de suplemento femenino del diario vaticano "L'Osservatore Romano", Lucetta Scaraffia, aseguró a EFE que para resolver el problema de la pederastia en el clero se necesitan más mujeres en la formación de los sacerdotes.
Scaraffia es desde 2012 la coordinadora del suplemento mensual "Donne, Chiesa, Mondo" («Mujeres, Iglesia, Mundo») que revolucionó con su publicación la comunicación vaticana, pues por primera vez se dedicaba una publicación sólo para escuchar la voz de las mujeres.
Se asegura que el papa Francisco tiene a esta intelectual católica, con una pasado de no creyente y que se define siempre como feminista, en alta estima.
En una entrevista con EFE, Scaraffia se hizo de nuevo portavoz de su lucha desde hace años: La necesidad de que se escuche a las mujeres en todo el mundo católico y también dentro del Vaticano y abordó el escándalo de los abusos sexuales por parte de religiosos.
Para esta historiadora y periodista, es necesario "un cambio radical en la formación de los sacerdotes" para atajar el problema de los abusos.
Y esta formación tiene que comenzar con un "cambio en la relación que los sacerdotes tienen con las mujeres y empezar a tener mujeres en una posición superior, como profesoras, conferenciantes..., así como estudiar menos teología y más historia".
"Se necesita un mayor contacto con la realidad" en los seminarios, asegura.
Para Scaraffia, la abolición del celibato no resolvería el problema porque recuerda "que la mayor parte de los casos de abusos sexuales a menores se producen en el seno de las familias".
Scaraffia denuncia además que al igual que en el mundo laico, en la Iglesia católica también existe el "arribismo" y "los hombres ven a las mujeres como las que te quieren quitar el puesto" y por ello "no es bien visto bien el ingreso de la mujeres en las jerarquías eclesiásticas".
El problema es que "no están acostumbrados a tener a mujeres al lado. Es que ni lo piensan", añade.
Para la escritora junto con Silvina Pérez (directora de la edición en español de L'Osservatore Romano) del libro "Francisco. El papa americano", es importante que el pontífice argentino siga hablando de la importancia de que se escuche y se legitime a las mujeres.
"Francisco está intentando hacer todo lo posible para romper estas resistencias, porque no hay dogmas, no hay problemas teológicos, por lo que una mujer no puede ser portavoz del Vaticano o responsable de un dicasterio, pero tenemos que ser las mujeres las que tenemos que reivindicar la presencia en la Iglesia", explica.
Desde su suplemento, Scaraffia denunció hace unos meses las condiciones de muchas religiosas relegadas a ser las "señoras de la limpieza" en las casas de los sacerdotes, obispos, y cardenales. "Estas mujeres no se han metido a monjas para limpiar casas si no para evangelizar", critica.
Al papa Francisco, Scaraffia le pide que "escuche a las mujeres". "La importancia no es dar cargos a las mujeres si no escucharlas. En todas las reuniones en las que se debate sobre la Iglesia, es necesario llamar a las mujeres. Darlas la dignidad de interlocutoras", destaca.
Porque, asevera, "no sirven 'cuotas'", si se escucha y conoce a las mujeres, "luego vendrá espontáneamente llamarlas para ocupar los cargos importantes".