Empresa canadiense acordó venta del 30 por ciento de mina chilena a firma japonesa
Se trata del yacimiento de cobre a rajo abierto Quebrada Blanca, ubicada a 240 kilómetros de Iquique.
La operación está sujeta a la aprobación de los entes reguladores.
De aprobarse la operación, Teck mantendrá el 60% de la propiedad, mientras las filiales Sumitomo tendrá el 30 por ciento y el 10 por ciento restante continuará en manos de Enami.
La minera canadiense Teck Resources Limited anunció este martes que ha acordado la venta del 30 por ciento de la propiedad de la mina de cobre Quebrada Blanca (QBSA), situada en el norte de Chile, a las japonesas Sumitomo Corporation y Sumitomo Metal Mining, en 1.200 millones de dólares.
En un comunicado emitido en Santiago, Teck dijo que los recursos de la operación serán destinados a financiar la construcción del proyecto Quebrada Blanca 2 (QB2), que su junta directiva ha aprobado, con la meta de iniciar su fase productiva el año 2021.
Quebrada Blanca es una mina a rajo abierto situada a unos 240 kilómetros al sureste de Iquique, a 4.400 metros sobre el nivel del mar, en la región de Tarapacá.
QB2, en tanto, es un proyecto que supone una inversión de unos 4.740 millones de dólares, destinado a aumentar la producción del yacimiento a unas 240.000 toneladas de cobre y 6.000 toneladas de molibdeno al año y extender en más de 30 años su vida útil.
En el comunicado de este martes, el presidente de Teck, Don Lindsay, destacó que QB2 "es uno de los principales activos de cobre no desarrollados del mundo" y aseguró que la operación con Sumitomo reduce el riesgo de la inversión de Teck en el proyecto y lo mejora.
"QB2 será una operación de larga vida, de bajo costo y con un gran potencial de expansión, incluyendo la opción de duplicar la producción o más para convertirse en uno de los cinco principales productores mundiales de cobre", afirmó el ejecutivo.
Una vez concretada la operación, que está sujeta a la aprobación de los entes reguladores, Teck mantendrá una participación del 60 por ciento de la propiedad de Quebrada Blanca, mientras Sumitomo Metal Mining y Sumitomo Corporation tendrán el 30 por ciento y el 10 por ciento restante continuará en manos de la estatal chilena Enami (Empresa Nacional de Minería).