Rescatistas brasileños suspendieron la búsqueda de víctimas por fuertes lluvias
La catástrofe minera en la ciudad de Brumadinho suma 121 muertos y 226 desaparecidos.
La tragedia minera ha causado al menos 121 muertos y hay 226 desaparecidos.
Los equipos de rescate brasileños suspendieron la búsqueda de nuevas víctimas de la catástrofe minera en la ciudad de Brumadinho, en el sudeste del país, debido a las fuertes precipitaciones caídas durante esta madrugada.
Según el oficial del Cuerpo de Bomberos Anderson Passos, con las lluvias de la última noche "existe el riesgo de que los residuos minerales que aún se encuentran en la represa -que se rompió el pasado 25 de enero- lleguen a la zona donde actúan las brigadas de rescate".
Los helicópteros usados en la búsqueda de supervivientes y posibles víctimas tampoco pudieron iniciar sus actividades este lunes.
De acuerdo con el último recuento, la tragedia minera ha causado al menos 121 muertos y hay 226 desaparecidos, la mayoría trabajadores del gigante minero Vale, propietaria del dique de contención que colapsó cerca de Brumadinho, localidad en el estado de Minas Gerais.
Construida en 1976, la represa tenía capacidad para almacenar cerca de 13 millones de metros cúbicos de residuos ferrosos y agua, que arrasaron con el área administrativa de Vale, casas, granjas, posadas y carreteras en pocos minutos y con una fuerza descomunal, como si se tratara de un tsunami de barro.
Residuos llegan a los 20 metros de altura
Las labores de rescate son complejas y se desarrollan de manera lenta debido a la complejidad del terreno tras la tragedia, pues hay zonas en las que los residuos llegan a los 20 metros de altura, en medio de la desesperación de los familiares de las víctimas.
Las autoridades brasileñas aún no han conseguido medir con exactitud cuál es la situación del río Paraopeba, al que ha llegado el mar de lodo destruyendo gran parte de la fauna y la flora que alberga, según denuncian organizaciones no gubernamentales.
Los habitantes de Brumadinho continúan conmocionados por esta catástrofe. La vuelta de las clases, prevista para este lunes, fue suspendida por tiempo indeterminado por causa de la tragedia, si bien el Ayuntamiento dijo que la previsión es que el año lectivo comience antes de la próxima semana.