Los millones extra que le reprocha Contraloría a Estela Ortiz

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Autor: Cooperativa.cl

La amiga personal de Michelle Bachelet recibió más de 3,5 millones mensuales de sobresueldo.

Además, el consejo que dirigía no cumplió con las reuniones anuales que establecía su decreto de creación.

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Estela Ortiz fue vicepresidenta de la Junji en primer mandato de Bachelet.

La Contraloría General de la República encontró irregularidades en los pagos recibidos por asesores del Consejo Nacional de la Infancia (Conain), como en el caso de Estela Ortiz, amiga personal de la ex Presidenta Michelle Bachelet y quien recibió 3.047.568 pesos mensuales más de lo que correspondía.

Según publicó Ahora Noticias, los honorarios de Ortiz -ex secretaria ejecutiva de Conain- eran de 7.553.813 pesos y, al compararlos con otros cargos del mismo rango, se concluyó que los excedían en un 67 por ciento. En conclusión, en solo un año recibió más de 36 millones de pesos de sobresueldo.

En este puesto, Ortiz ayudó a coordinar la creación de políticas públicas para la protección de derechos de la infancia y adolescencia, tomando como base su trabajo como vicepresidenta de la Junji en el primer mandato de Bachelet.

En sus casi cinco años de existencia, Conain contó con un presupuesto anual de más de 3 mil millones de pesos para su funcionamiento y la remuneración de sus 50 funcionarios.

Ortiz no era el único caso de irregularidades, ya que la Contraloría en su investigación también descubrió que los honorarios de algunos administrativos eran 73 por ciento superior a los correspondientes, situaciones "altamente complejas" para la Contraloría.

Además, el organismo fiscalizador determinó que el Conain debía sesionar al menos 6 veces al año, de acuerdo al decreto que lo creó, pero se reunió apenas 8 veces en sus 4 años de existencia.

El Consejo Nacional de la Infancia dejó de existir el 31 de marzo de 2018 y sus competencias corresponden actualmente a la Subsecretaría de la Niñez.

Ortiz es viuda de José Manuel Parada, uno de los 3 profesionales comunistas degollados en 1985 por la Dirección de Comunicaciones de Carabineros (Dicomcar) y madre de Javiera Parada, militante de Revolución Democrática y quien fuera agregada cultural en Estados Unidos durante la segunda administración Bachelet.