¿Crimen o malentendido? Confuso incidente involucra a un Uber, caramelos y un atropello
Dos mujeres denunciaron a un chofer de la aplicación en Antofagasta: aseguran que intentó drogarlas y secuestrarlas.
El examen toxicológico resultó negativo y el hombre acusado asegura que fueron ellas quienes intentaron hacerle un "perro muerto".
La difusión de la versión inicial en redes sociales se viralizó rápidamente y motivó que el chofer recibiera múltiples amenazas. Desde el Gobierno hablan de "psicosis".
Enorme revuelo generó durante las últimas horas una publicación de redes sociales que denunciaba un supuesto intento de secuestro -por parte de un conductor de Uber- en contra de dos mujeres: una de ellas una menor de edad que, en su huida, fue atropellada.
El incidente ocurrió el fin de semana en Antofagasta: una tía y su sobrina (esta última de 15 años) solicitaron en pleno centro de la ciudad un Uber, que abordaron en la intersección de Condell con Prat y luego abandonaron de modo intempestivo, antes de llegar a su destino.
¿El motivo? Las versiones de ellas y del conductor se contraponen, pero dan pie para creer tanto en un eventual delito como en un terrible malentendido.
"Subimos y el conductor nos ofreció frugelé, a lo que nosotros nos negamos. Después empezó a mover una bolsa con un polvo blanco y mi tía empezó a sentirse súper mal. Yo no sentí nada en ese momento, pero (mi tía) me dijo que saliéramos de ahí", relató la menor.
Tras bajar del vehículo, ambas mujeres corrieron y subieron a una micro, en la que avanzaron algunas calles, temerosas de estar siendo seguidas por el chofer. En un momento optaron por descender y cruzaron la Avenida Antonio Rendic, donde la adolecente fue embestida por un furgón que transitaba de sur a norte.
"Nos bajamos y mi tía me dijo que corriéramos, porque el auto nos venía persiguiendo. Yo empecé a correr y venía justo un auto. No recuerdo cómo fue (el atropello), porque me fui a negro y desperté cuando estaba arriba de la ambulancia", agregó la niña, que, providencialmente, no sufrió lesiones de mayor consideración.
Conductor temió "perro muerto"
La versión de Franco Farías, el conductor acusado, es muy distinta, aunque coincide en algunos aspectos con la de las mujeres.
Asegura que ofreció a las mujeres los frugelés como un gesto de buen servicio que tiene con todos los pasajeros, pero niega haber utilizado ningún polvo blanco.
Agrega que cuando las mujeres bajaron del vehículo él las siguió porque temió que le estuvieran haciendo un "perro muerto".
"Si yo tuve la culpa en algo fue bajarme a cobrarles el pasaje, que, de partida, no pagaron", dice Farías, que asegura haber sufrido "mucho daño" producto de una funa en redes sociales emprendida por familiares de las presuntas víctimas.
"Me dejaron sin trabajo, llaman a la mamá de mi hijo, a mis hijos los molestan y tengo miles de mensajes con amenazas de gente que no conozco", cuenta Farías, a quien Uber le canceló la cuenta.
El chofer agrega que, tras el incidente, siguió trabajando normalmente, y sólo tras recibir un llamado de familiares -desde Arica- se enteró de que en internet era denunciado como secuestrador y que la joven había sido atropellada.
Por este motivo, se acercó a Carabineros a fin de interiorizarse de lo sucedido.
Gobierno habla de "psicosis"
Las mujeres presentaron una denuncia ante la Segunda Comisaría de Carabineros de Antofagasta, donde ambas situaciones –el atropello y el presunto secuestro- fueron abordados paralelamente.
La Fiscalía ordenó además un examen toxicológico a las denunciantes, cuyo resultado -según fuentes de la institución- resultó negativo.
Desde el Gobierno enfatizaron que todos los antecedentes se encuentran en manos de la Fiscalía y será esta entidad la que determinará la verdad de los hechos. Sin embargo, la gobernadora de Antofagasta, Katherine López, advirtió sobre los riesgos de las verdaderas "psicosis" que en ocasiones desatan publicaciones de redes sociales sin verdadero sustento.
"Hay muchas personas que, al ver publicaciones, sin investigar la comparten y opinan, generando muchas veces una psicosis colectiva, que sólo produce inseguridad en la población, especialmente en las mujeres, que tras la filtración de conversaciones del portal Nido.org no están tranquilas", reflexionó López.