Iquique: Familia de conscripto que protagonizó fatal tiroteo inicia acciones legales

La familia del soldado conscripto Marco Velásquez, quien mató a dos funcionarios militares y luego se suicidó, interpondrá acciones legales en el Juzgado de Garantía de Iquique durante este jueves.

Asi lo confirmaron a Cooperativa Regiones fuentes ligadas a la familia del joven de 18 años, quienes expresaron -a través de una declaración- que mediante dichas acciones pretenden "que los hechos sean investigados a fondo, se sepa la verdad y se sancione a los culpables finales de la muerte de Marco Velásquez y de las otras dos víctimas fatales". 

"No confiamos en la justicia militar, puesto que no tiene autonomía para indagar de manera objetiva", añadieron exigiendo "como familia, una investigación independiente, seria y rápida sobre los hechos previos a lo ocurrido el sábado 16 de marzo del presente año". 

La querella criminal fue interpuesta contra quienes resulten responsables por el delito de apremios ilegítimos, tratos crueles inhumanos y degradantes, a raíz de las denuncias de bullying y malos tratos que -según la familia, sufrió el joven al interior del recinto castrense. 

La abogada de la familia, Paula Altamirano, indicó a que "creemos que la competencia del caso debiera ser de la justicia ordinaria porque se entiende como un delito común que protege un bien jurídico civil no castrense, y que además explícitamente consideramos que estos actos delictivos en contra de Marco se produjeron cuando él era menor de edad".

Reconstitución de escena

En tanto, el miércoles se llevó a cabo la reconstitución de escena en la Escuela de Caballería Blindada de Iquique, diligencia encargada por el fiscal militar, mayor Jaime Arriagada, a fin de esclarecer la dinámica de los hechos ocurridos el pasado sábado.

La familia de Velásquez alega que ésta no les fue comunicada de manera formal: "Por datos nos enteramos".

En la ocasión se pudo determinar que Marco Velásquez -quien se encontraba haciendo guardia en el sector de tanques del recinto castrense- caminó de forma sigilosa hasta la guardia central del recinto, donde disparó contra el cabo primero Pedro Benavides y luego contra el sargento segundo Fernando Zamorano. 

Posteriormente remató de dos diparos -en la cara y el tórax- a Benavides, para finalmente terminar con su vida, suicidándose con su propia arma de servicio. 

Según lo establecido por la investigación, el soldado actuó de forma premeditada, ya que al momento del ataque se encontraba con tapones en sus oídos.