Sonrisa torcida de un niño de tres años ocultaba silencioso cáncer terminal
Jack presentaba problemas a la vista, pesadillas y comenzó a parpadear de un ojo.
Los médicos ingleses estimaron que el pequeño tiene un glioma pontino intrínseco difuso y le estiman entre seis meses a un año de vida.
Los padres de Jack crearon una página para recaudar dinero y disfrutar los últimos meses junto a su hijo.
Los padres de un niño de tres años identificado como Jack dieron cuenta que éste se reía con la boca torcida, tenía problemas a la vista y pesadillas cuando dormía, por lo que le realizaron un chequeo médico que determinó que padece un cáncer terminal.
En un principio Wesley Lacey (28) y Rebecca Oldham (29), que viven en South Yorkshire, Inglaterra, señalaron que además el niño comenzó a parpadear de un ojo, pero no le dieron importancia a estos hechos, porque pensaban que el niño imitaba a alguien.
Sin embargo, el niño comenzó a caminar con las manos hacia delante y se arrastraba por el suelo, lo que terminó por llamar la atención de sus padres, quienes expresaron que fue un comportamiento inusual y que los síntomas aparecieron en un período de un mes.
Al llevarlo al hospital infantil de Sheffield, los médicos determinaron con una tomografía computarizada que el pequeño padece de un glioma pontino intrínseco difuso grave (DIPG), un cáncer terminal muy agresivo que crece rápidamente en el cerebro, afectando las funciones básicas del organismo como el sueño, la respiración y la presión arterial.
"Estamos rotos. Esta noticia es el momento más oscuro de nuestras vidas, ni siquiera puedo empezar a pensar en que él no esté allí. No tiene parientes fallecidos, no hay nadie esperándolo del otro lado", dijo Wesley al Daily Mail.
"Nuestro médico nos dijo que tiene seis meses de vida aproximadamente por el tipo de tumor canceroso", expresó el padre, quien agregó que el niño puede llegar a vivir un año si reacciona positivamente al tratamiento.
Los padres de Jack crearon una página para recaudar dinero tanto para disfrutar los últimos meses junto a su hijo como para el eventual funeral.