Se desploma nivel de satisfacción de chilenos con su bienestar personal
La cifra sufrió un descenso de ocho puntos, llegando a un 26 por ciento.
Las bajas más significativas corresponden al sector financiero y a las proyecciones en los próximos cinco años.
La satisfacción con la vida sexual logró un aumento significativo.
El nivel de satisfacción de los chilenos con su bienestar personal descendió en relación al año anterior, según arrojó una medición realizada por GfK Adimark, la Clínica Universidad de Los Andes y Salcobrand.
Según publicó La Tercera, el índice sufrió una caída de ocho puntos porcentuales en relación al año anterior, llegando a un 26 por ciento, el resultado más bajo desde que se aplica el sondeo.
Además, la cantidad de encuestados que se declara "nada satisfecho" con su bienestar aumentó al 5 por ciento, punto más alto desde 2016.
Los descensos más significativos en la medición corresponden al ámbito financiero, en el que bajó la cantidad de personas que pueden destinar una parte de su presupuesto a realizar actividades como salir a comer, ir a eventos culturales o viajar, desde un 14 al 12 por ciento.
Mientras tanto, se mantiene el 11 por ciento que asegura tener un nivel "razonable" de deudas.
Otro aspecto negativo son las proyecciones sobre la situación económica de los encuestados para los próximos cinco años, un 53 por ciento de los cuales piensan que será mejor, frente al 61 por ciento de 2018.
En paralelo, un 7 por ciento considera que la situación será peor en los próximos cinco años.
Cifras dispares en salud
En el ámbito de la salud, la medición mostró descensos en relación al acceso, ya que un 73 por ciento respondió "sí" a la pregunta sobre si pueden consultar a un médico cada vez que lo necesitan, 10 puntos menos que el año anterior.
Sobre prácticas de vida sana, se detecta un menor entusiasmo en el consumo regular de frutas o verduras o la mantención de hábitos alimenticios correctos, especialmente en las mujeres.
Sin embargo, el aspecto que tuvo un aumento fue la satisfacción con la vida sexual, que llegó a un 30 por ciento, duplicando lo registrado en 2016.
El estudio se realizó en 1.001 hogares entre el 7 de enero y 10 de febrero de 2019 en Santiago y otras siete ciudades.