Corte Suprema: Buscar y promover el diálogo es un deber ético
"La democracia no puede entenderse reducida" a votar, dijo el juez Brito.
"El régimen democrático se nutre del diálogo", expresó el presidente del máximo tribunal.
El presidente de la Corte Suprema, Haroldo Brito, aludió a la contingencia social que vive el país en una ceremonia de juramento de nuevos abogados ante el máximo tribunal, realizada este miércoles en el Palacio de Tribunales.
En su discurso, el juez dijo que entiende "el diálogo como una virtud propia de la democracia y, a la vez, como la principal herramienta para la solución de las controversias".
"La democracia suele ser comprendida únicamente como una forma de gobierno y por ello se la ve reducida a un sistema que garantiza la participación de los ciudadanos en el gobierno del Estado a través de votaciones populares. La democracia no puede entenderse reducida a ello", sentenció.
Es -agregó- "también una forma de convivencia que permite la participación en un sentido mucho más amplio. El régimen democrático se nutre del diálogo para informar las decisiones que luego se adoptan y formalizan en normas jurídicas".
"El diálogo cobra especial valor cuando el desarrollo y las tensiones que surgen de la convivencia hacen necesaria la búsqueda de soluciones. En democracia el diálogo debe aparecer como parte integrante de un sistema de expectativas, de reconocimientos mutuos y de garantías recíprocas entre los actores sociales", consideró.
Ante los nuevos abogados, el timonel de la Suprema enfatizó que "el dialogo siempre es esencial, propio de conductas democráticas".
"Constituye un elemento capaz para iluminar con la razón y la buena fe posiciones encontradas, aparentemente irreconciliables. Por ello, buscar y promover el diálogo también constituye un deber ético", concluyó.