Fiscalía confirmó cuarto caso de balas perdidas durante la madrugada de Año Nuevo

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Autor: Cooperativa.cl

Un niño de 12 años de Pedro Aguirre Cerda recibió un disparo en su casa, pero está fuera de riesgo vital.

Se suma a otro menor herido en La Granja y otros dos sucesos en San Ramón.

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El fiscal Christian Toledo confirmó estos cuatro casos de "balas locas".

La Fiscalía ratificó este jueves un cuarto caso de una balas perdidas durante la madrugada del Año Nuevo en Santiago.

Este último caso corresponde un niño de 12 años que resultó herido en su domicilio de Pedro Aguirre Cerda, quien fue internado en un centro asistencial, aunque se encuentra fuera de riesgo vital.

"Habría otro hecho ocurrido en la comuna de Pedro Aguirre Cerda donde también habría resultado herido un menor de edad producto de una bala que habría ingresado al domicilio de la víctima. El menor también está fuera de riesgo vital y hospitalizado en el Hospital Exequiel González Cortés", dijo el fiscal Christian Toledo.

Este hecho se suma a otros tres que ya consignó el Ministerio Público, uno en La Granja otros dos en San Ramón, los cuales se investigan en conjunto por su cercanía geográfica.

En el caso de La Granja, un niño de ocho años recibió un impacto de bala en su espalda mientras jugaba en una plaza, por lo que fue trasladado hasta el Hospital Sótero del Río, donde está fuera de riesgo vital.

Además, uno de los casos de San Ramón se produjo por un impacto de bala que se produjo en un domicilio donde un celular que sostenía una niña resultó dañado.

El segundo caso de San Ramón

Mientras que en la otra situación dada a conocer en esta comuna corresponde a una niña que fue rozada por una bala mientras estaba en su casa, resultando con lesiones menos graves, siendo trasladada al Hospital Padre Hurtado.

La tía de la menor, Sara Soto, comentó que pasaron por "un momento amargo" por el impacto de bala que recibió su sobrina en la espalda.

"Como a la 01:30 le dio sueño a la niña entonces se fue a acostar con la mamá en la cama, ahí fue cuando le llegó la bala. Nosotros estábamos en la otra parte del segundo piso y escuchamos un grito que decía '¡me quema, me quema mamá!'. Con la desesperación corrimos todos a la pieza, le levantamos la polerita y le vimos la quemadura de la bala en la columna", dijo la tía de la menor.

"Corriendo la cama con un vecino nos dimos cuenta que era una bala y no un fuego artificial lo que había caído", recalcó la familiar.

Todos los casos están a cargo de la Brigada de Homicidios de la PDI que está trabajando en conjunto con fiscales de la Fiscalía de Delitos Violentos y con la Unidad de Víctima de la Fiscalía Sur.