Prisión preventiva para dos acusados de participar en fiesta clandestina en Quinta Normal
Los imputados recibieron esta medida cautelar por poner en riesgo la salud pública y se reincidentes.
Además, otros involucrados quedaron con arresto domiciliario total.
El Sexto Juzgado de Garantía decretó este domingo la prisión preventiva de dos personas que participaron de una fiesta clandestina esta madrugada en la comuna de Quinta Normal.
Los imputados, identificados como Yorel Manrique y Anderson Ventura, recibieron esta medida cautelar por poner en riesgo la salud pública y por ser reincidentes en esta infracción, por la que ya estaban con arresto domiciliario.
Además, otros dos participantes más de esta fiesta quedaron con arresto domiciliario total.
Sobre esta decisión, el fiscal Manuel Zuñiga, de la Fiscalía Centro Norte, señaló que "dos de los imputados, que si bien registraban detenciones anteriores por el artículo 318 del Código Penal, quedaron con arresto domiciliario total, considerando la gravedad del delito por el cual fueron formalizado".
"Otros dos de los imputados, que también presentaban detenciones anteriores, ya se encontraban sujeto a medidas cautelares de alta intensidad como son arresto domiciliario, fueron sometidos a la medida cautelar de prisión preventiva", detalló el persecutor.
AHORA: 6° Juzgado de Garantía decreta prisión preventiva de Yorel Manrique y Anderson Ventura, por poner en riesgo la salud pública tras participar en fiesta clandestina en Quinta Normal. Otros 2 imputados quedaron con arresto domiciliario total. Plazo de investigación: 60 días. pic.twitter.com/TB1HluO20G
— Poder Judicial Chile (@PJudicialChile) August 2, 2020
Se detuvo a 14 personas
El hecho se registró en un galpón ubicado en Avenida San Pablo 3359, donde vecinos denunciaron ruidos molestos y posteriormente Carabineros detuvo a 14 personas que realizaba una fiesta en el lugar.
Según informó la representante de la dueña del inmueble, este galpón fue arrendado a una familia para vender ropa usada, pero hace tiempo se dejó de practicar este rubro y comenzaron las fiestas clandestinas, incluso con venta de alcohol.
"Se arrendó para usada con contrato y todo, terminó la ropa usada y comenzaron a cerrar todo, ahí empezaron las fiestas. Queremos soldar las puertas ahora, los vecinos lo único que quieren es que se vayan", aseguró la mujer encargada del recinto.
Se dio un plazo 60 días para la investigación, tiempo que los dos imputados se mantendrán en prisión de no mediar apelación alguna a la medida cautelar.