Reino Unido evaluó instalar barreras marítimas para bloquear la llegada de inmigrantes
Medio británicos revelaron las intenciones del gobierno de Boris Johnson para colocar vallas flotantes en el Canal de la Mancha.
El primer ministro consultó a la asociación del sector marítimo, que le expresó la imposibilidad "legal" de recurrir a ese sistema, según el Financial Times.
El Gobierno del Reino Unido se planteó instalar barreras flotantes en el Canal de la Mancha para bloquear la llegada de inmigrantes en bote desde Francia a la costa inglesa, informan este viernes los medios británicos.
Un documento filtrado inicialmente al Financial Times revela que el Ejecutivo del primer ministro, Boris Johnson, consultó a la asociación del sector marítimo Maritime UK si sería viable colocar esas vallas, entre otras ideas, para frenar el avance por mar de presuntos solicitantes de asilo.
Según el FT, Maritime UK expresó la opinión de que "no sería posible legalmente" recurrir a ese sistema, en virtud de la Convención internacional de seguridad en las aguas.
Esta revelación sobre las gestiones del Ministerio del Interior se conoce después de que ayer The Times publicara que también se planteó retener a los inmigrantes en transbordadores varados en el mar e incluso el uso de cañones de agua, lo que la oposición laborista ha calificado de "ridículo" e "inhumano".
El miércoles, el FT dio la primicia de que el ministerio, liderado por Priti Patel, había sopesado asimismo construir un centro de procesamiento de solicitantes de asilo en la isla de Ascensión, situada en el océano Atlántico a 6.000 kilómetros del Reino Unido, si bien esta opción fue descartada por dificultades logísticas.
Sin confirmar ninguna de estas informaciones, Interior ha admitido que estudia "cualquier opción" para detener la llegada de inmigrantes en barca por el Canal de la Mancha, situado entre Francia e Inglaterra.
Unas 7.000 personas han llegado de esta manera a la costa inglesa en lo que va de año, frente a 1.890 en todo 2019, de un total de 34.000 inmigrantes que han pedido asilo en el Reino Unido en la primera mitad de 2020.