Las claves de la crisis política de Guatemala en el primer año de Giammattei

Publicado:
- Periodista Digital:
EFE

Las manifestaciones contra su gestión han aumentado en las últimas semanas.

Su labor durante la pandemia, los problemas económicos y un criticado presupuesto 2021, son algunas de las molestias de la población.

 EFE

El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, enfrenta una grave crisis política en solo diez meses de Gobierno tras la quema el sábado del Congreso a manos de manifestantes encapuchados y una masiva protesta en su contra.

Estas son las claves de la crisis que amenaza al Gobierno de Giammattei (investido en enero pasado) y también a la clase política del país centroamericano.

1. La pandemia.

"¿Dónde está el dinero?" es una de las principales preguntas de los manifestantes que llegaron el sábado a exponer su rechazo a Giammattei, haciendo referencia a los fondos de emergencia por el Covid-19 que supuestamente nunca llegaron a la población.

El Congreso guatemalteco, con mayoría oficialista de la agrupación política de Giammattei, Vamos, añadió desde marzo 2.200 millones de dólares al presupuesto de 2020 para auxiliar a la población afectada económicamente por el coronavirus, financiados con base en créditos internacionales.

Sin embargo, ocho meses después del primer contagio en marzo, la ayuda ha sido irregular según diversas fuentes.

Uno de los métodos de ayuda fue denominado "Bono Familia" y prometía entregar 390 dólares en tres cuotas a familias de escasos recursos, pero una evaluación de la organización no gubernamental Paraíso Desigual certificó que finalmente solo se entregarán 292 dólares en total, priorizando las ayudas para la región central del país y olvidando los departamentos con más pobreza.

Además, se certificó en fiscalizaciones hechas por algunos diputados ciertas anormalidades a todo nivel.

"Esto es un desastre... muertos, empleados públicos y municipales, miles que no son pobres y miles que están fuera de Guatemala cobraron el 'Bono Familia' y el bono para la economía informal", denunció el 16 de noviembre en sus redes sociales el legislador Carlos Barreda, de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE).

2. Millones van y millones vienen

El 16 de octubre, la Fiscalía Contra la Impunidad del Ministerio Público (los remanentes de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala) decomisaron 15,7 millones de dólares en efectivo (en diversas divisas) en una casa particular en Antigua Guatemala.

El supuesto dueño del dinero es el ex ministro de Comunicaciones de Jimmy Morales (2016-2020), Jose Luis Benito Ruiz, a quien las autoridades intentaron sin éxito capturar después de encontrar su nombre en una de las maletas con el efectivo (por un viaje realizado recientemente).

Diez días después, el 26 de octubre, un funcionario del Ministerio de Comunicaciones del Gobierno de Giammattei indicó en el Congreso que desconocía el destino de 17,5 millones de dólares, en un hecho actualmente bajo investigación del Ministerio Público.

Entre el decomiso de los 15,7 millones de dólares y la 'pérdida' de los otros 17,5 millones de dólares por el Gobierno de Giammattei no hay relación, pero ambos generaron malestar dentro de la población tanto en redes sociales por la normalización de la corrupción, la misma que llevó a la cárcel al ex presidente Otto Pérez Molina en 2015.

3. Eta e Iota

Los huracanes Eta e Iota causaron estragos y destrucción a su paso por Centroamérica durante los primeros 15 días de noviembre. Entre ambos causaron la muerte de 59 personas, 99 desaparecidos, 1,5 millones de afectados, 211 mil evacuados y miles de millones de dólares en pérdidas por cultivos inundados e infraestructura.

El presidente Giammattei intentó responder a la catastrófica emergencia pero recibió críticas por la falta de advertencias por las autoridades de protección civil a las poblaciones en riesgo, mientras algunas comunidades aún siguen inundadas.

No tuvo tampoco buena recepción dentro de algunos sectores la respuesta del mandatario en el interior del país a un periodista que lo cuestionó por la falta de ayuda a un poblado aislado, sin comunicación y con carencia de alimentos en el norte del territorio: "Que me la pidan. Adivino no soy. Que nos lo pidan. Esta es la primera vez que me la están diciendo. Si están incomunicados, tal vez no están tan incomunicados porque lo sabe usted".

4. El presupuesto 2021

El pasado miércoles, a las 05.30 de la madrugada, 115 diputados del Congreso de Guatemala aprobaron el presupuesto del Estado para 2021, bajo el apoyo de la mayoría oficialista del partido Vamos, de Giammattei, incluyendo el presidente del Parlamento, Allan Rodríguez.

Los legisladores que se opusieron al presupuesto señalaron que no hubo acceso al documento final para los 160 diputados, en una maratónica sesión que empezó el martes por la tarde bajo fuertes medidas de seguridad en las afueras de las instalaciones del Congreso.

El presupuesto provocó ese mismo miércoles la ira general de la población y principalmente de algunos artistas que, con su influencia en redes sociales, le dieron fuerza al malestar contra Giammattei. Entre ellos se encuentran el cantante de ska y rock Francisco Paez y la chef Mirciny Moliviatis.

En el nuevo presupuesto, según un estudio divulgado por la organización no gubernamental del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi), el "gasto público" busca "priorizar la asignación a infraestructuras, pero descuida a la población y sus necesidades".

5. El vicepresidente y el centro de gobierno

El viernes por la noche, de manera sorpresiva, el vicepresidente guatemalteco, Guillermo Castillo, pidió públicamente en una rueda de prensa a Giammattei que renunciaran en conjunto para "oxigenar" a la nación centroamericana porque "las cosas en el país no están bien".

Son amplias las diferencias entre Castillo y Giammattei desde hace meses, pero varias versiones y el mismo vicepresidente han apuntado a un ente estatal denominado Centro de Gobierno como el principal punto de desencuentro.

El Centro de Gobierno se ha convertido en el eje de la Administración de Giammattei al igual que su director, Luis Miguel Martínez Morales, un ingeniero de 31 años sin experiencia como funcionario convertido en el hombre de confianza del mandatario.

Martínez Morales, según el propio gobernante de 64 años, es un amigo "de hace muchos años".

El quiebre entre presidente y vicepresidente no es irreversible como dijo Castillo el viernes, pero sí siembra dudas sobre el futuro del Gobierno.