A un año del asesinato de Soleimani, Irán no olvida su venganza contra EEUU
"Cualquier acción que tome el enemigo contra nosotros será respondida con un golpe recíproco", advirtió la Guardia Revolucionaria.
Cientos de personas se reunieron la madrugada del domingo para exigir represalias contra Norteamérica.
Irán sigue clamando venganza contra Estados Unidos por el asesinato hace un año de su poderoso comandante Qasem Soleimani, cuya pérdida no ha mermado la influencia iraní sobre sus milicias aliadas en un Oriente Medio en creciente tensión.
"Cualquier acción que tome el enemigo contra nosotros será respondida con un golpe recíproco, decisivo y firme", aseguró este sábado el comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria iraní, Hosein Salamí.
Washington teme una acción de represalia por parte de Teherán coincidiendo con el primer aniversario de la muerte de Soleimani en un bombardeo selectivo estadounidense el 3 de enero de 2020 cerca del aeropuerto de Bagdad.
Aunque una semana después la Guardia Revolucionaria atacó con misiles una base militar en Irak con presencia de tropas estadounidense, la venganza definitiva supuestamente todavía no se ha ejecutado.
Para honrar la memoria de Soleimani, cientos de personas se congregaron hoy ante su tumba en la sureña Kerman, su ciudad natal. Tras aguardar pacientemente su turno, tocaron el sepulcro, cubierto con flores, y rezaron durante una ceremonia en el cementerio y en una mezquita próxima.
Su imagen es omnipresente en carteles y murales en las calles tanto de Kerman como de Teherán, en los que también aparece el número dos de la milicia iraquí Multitud Popular, Abu Mahdi al Mohandes, fallecido en el mismo bombardeo hace un año.
Soleimani, elevado a mártir y héroe en Irán y en otros países de la región como Irak y Siria, era el comandante de la Fuerza Quds, encargada de las misiones en el extranjero de la Guardia Revolucionaria.
SU LEGADO SE MANTIENE FIRME
El asesinato de Soleimaní supuso un fuerte golpe para Irán y su estrategia de influencia regional, pero un año después no hay grandes cambios en la política iraní de apoyo a movimientos armados afines como el iraquí Multitud Popular, el libanés Hizbulá o el palestino Hamás.
"Como buen comandante, informaba a sus colegas de sus planes y proyectos, los preparó para que siguieran su labor", explicó a Efe el experto en asuntos internacionales Sabah Zanganeh, quien ocupó en el pasado los cargos de diputado, viceministro y representante de Irán ante la Organización para la Cooperación Islámica.
Según el analista, la estrategia de la Fuerza Quds "no es diseñada por una sola persona", por lo que la muerte de Soleimaní en vez de influir en sus planes "motivó más a sus miembros para conseguir sus metas, incluida la retirada de las tropas estadounidenses de la región".
Irán lidera el llamado Eje de la Resistencia contra EE. UU. e Israel, vertebrado por la Fuerza Quds, que incluye a Siria y los citados grupos Multitud Popular, Hizbulá y Hamás, así como a los rebeldes hutíes del Yemen.
"No hay ninguna señal de ruptura de sus planes o de retroceso de sus fuerzas", subrayó Zanganeh, quien apuntó que esa estrategia es "a largo plazo, no se ha visto influida (por la muerte de Soleimani) y continúa en Irak, Siria, el Líbano, Palestina y el Yemen".
Su sucesor al mando de la Fuerza Quds, Esmail Qaani, subrayó de hecho ayer que la vía trazada por Soleimani para este cuerpo militar y para el Eje de la Resistencia "no cambiará, pese a los actos perversos de Estados Unidos".
En el cementerio hoy en Kerman, Aqdas Jozai, una mujer de 65 años vestida con chador, dijo a Efe que su muerte fue "muy dura y dolorosa", pero que ahora "todos son Qasem Soleimani, hombres en el terreno para cumplir sus objetivos".
LA INCÓMODA PRESENCIA ESTADOUNIDENSE
Las tropas estadounidenses presentes en Irak y en numerosas bases militares del golfo Pérsico, entre otros lugares vecinos a Irán, son el principal objetivo y su retirada, la venganza póstuma por el asesinato de Soleimani.
"El camino de la dura venganza es el colapso del dominio político estadounidense sobre la región y la expulsión de EE.UU. de la zona", según el comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria.
Los intereses estadounidenses, principalmente la fortificada zona verde de Bagdad y bases militares iraquíes con tropas suyas desplegadas, se encuentran en el punto de mira y han sido blanco en el último año de frecuentes ataques con proyectiles.
Washington ha decidido reducir el número de sus soldados en suelo iraquí, donde en menos de dos semanas está previsto que solo queden 2.500 militares estadounidenses.
LA REGIÓN EN ALERTA
Por ello, ante el temor a nuevas represalias con motivo de la efeméride, Estados Unidos ha retirado el único portaaviones de la Armada que aún tenía desplegado en Oriente Medio y ha sobrevolado esta semana el golfo Pérsico con un grupo de bombarderos B-52 en un intento de disuasión.
Estos movimientos han sido tildados por Teherán de "provocación" en una carta al Consejo de Seguridad de la ONU, en la que se subraya que "tales tendencias belicistas pueden hacer escalar la situación a un nivel alarmante y EE. UU. será el único responsable".
Para Salamí, que aseguró que Irán "está preparado para reaccionar ante cualquier agresión", Estados Unidos intenta con estas medidas "escapar de la peligrosa pesadilla" que comenzó tras el asesinato de Soleimani.
EL CLAMOR POPULAR
Asimismo, cientos de personas se reunieron en la madrugada del domingo junto al aeropuerto de Bagdad, en el punto en el que hace un año fue adesinado el general iraní Qassem Soleimani, para clamar venganza contra Estados Unidos.
Los congregados, simpatizantes del grupo progubernamental Multitud popular, de las milicias proiraníes y de otras facciones armadas, portaban retratos de Soleimani y Muhandis, que murieron en un ataque de un dron estadounidense, y pancartas con eslóganes contra el país norteamericano.
En tanto el ministro iraní de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, acusó este sábado a Israel de planear ataques contra intereses de Estados Unidos en la región de Oriente Medio con el objetivo de escalar la tensión y provocar una guerra.
Zarif advirtió al presidente saliente estadounidense, Donald Trump, de no caer en "la trampa" y responsabilizar luego a Irán de esos posibles ataques para iniciar un conflicto.
"Nuevos informes de inteligencia de Irak indican que los agentes provocadores israelíes están planeando ataques contra los estadounidenses, poniendo a un Trump saliente en un aprieto con un falso 'casus belli' (acto que constituye motivo de guerra)", escribió Zarif en Twitter.