Felipe Rojas, imputado por crimen de Fernanda Maciel, inició huelga de hambre líquida en la cárcel
El imputado por el crimen de la joven ha tenido diversos enfrentamientos con Gendarmería.
Según la institución, Rojas cometió "faltas al régimen penitenciario" y habría intentado suicidarse.
Felipe Rojas, único imputado por el crimen de Fernanda Maciel, anunció el inicio de una huelga de hambre líquida acusando hostigamiento por parte de Gendarmería al interior de la Cárcel de Alta Seguridad.
Un informe de Gendarmería, publicado por El Mercurio, reveló las discrepancias y problemas que han enfrentado con Rojas, quien está formalizado por los delitos de homicidio calificado, aborto e inhumación ilegal.
El documento, enviado al Séptimo Juzgado de Garantía, revela que Rojas cometió "faltas al régimen penitenciario" y habría intentado suicidarse.
Según el relato de la institución, en víspera de Año Nuevo un funcionario ordenó -por segundo día consecutivo- al acusado a afeitarse, sin embargo, éste lo rechazó amenazando con agredir al gendarme.
Por ello, Rojas fue trasladado al cuarto piso del penal donde inició un aislamiento preventivo.
"El imputado habría intentado atentar contra su vida, siendo oportunamente asistido por el personal penitenciario y trasladado al servicio de urgencias del Instituto Siquiátrico Dr. José Horwitz Barak y luego devuelto a la unidad penal, donde recibe atención sicológica por parte de profesionales de la institución", añade el documento citado por Emol.
En su versión, Rojas asegura que accedió a afeitarse, sin embargo, el funcionario indicó lo contrario a un superior.
En su texto, el imputado por el crimen de Fernanda Maciel afirmó que "el funcionario me dijo textual 'no creo que vayas a sapear donde tu abogado'. Luego se retiró y volvió unos minutos más tarde, pero acompañado de tres funcionarios y me notifica que tengo que bajar hasta el subterráneo".
Y agregó: "La actitud del funcionario es bastante hostil hacia mi persona, en cuanto al trato, insinuando que no debería estar en ese piso y que debería estar en uno con la población penal para que lo pase mal".
Este enfrentamiento no sería el primero. Un altercado ocurrió el 20 de diciembre luego de la reconstitución de escena en la bodega donde fue encontrado el cuerpo de Fernanda Maciel.
"En el lugar se constituye el capitán A.C.S., quien le refiere que estaría cometiendo una falta al régimen interno, procediendo (Rojas) en amenazar que se cortaría entero si no le dan su llamado. Pasando unos minutos es atendido por la asistente social, quien debido a su atención, requeriría de un llamado telefónico para el citado interno", relató el gendarme.
Así, Rojas anunció que "por todos estos hechos manifiesto voluntariamente iniciar una huelga de hambre líquida, esperando que estas situaciones en mi contra se resuelvan de manera satisfactoria".