EE.UU. ejecutó a una mujer por primera vez en siete décadas
Lisa Montgomery, de 52 años, era la única prisionera en el corredor de la muerte del país, y fue condenada en 2007 por matar a una mujer embarazada y extraer su bebé.
Sus abogados atribuyeron dicho crimen a una eventual enfermedad mental, producto de abusos sexuales que sufrió en su infancia.
La ejecución por inyección letal se produjo en el complejo penitenciario de Terre Haute, después de que el Tribunal Supremo levantara la suspensión que tan solo unas horas antes había ordenado una corte federal.
El estado de Indiana ejecutó este miércoles a Lisa Montgomery, la única mujer que estaba en el corredor de la muerte de Estados Unidos, y la primera en ser ejecutada a nivel federal en más de seis décadas.
La ejecución por inyección letal se produjo en el complejo penitenciario de Terre Haute, después de que el Tribunal Supremo levantara la suspensión que tan solo unas horas antes había ordenado una corte federal.
Su muerte, de la que fue testigo un grupo de periodistas desde una sala contigua, se certificó pasada la 1:30 horas en Indiana, según algunos medios que recogieron el relato del proceso.
Montgomery renunció a su derecho a pronunciar unas últimas palabras. Se limitó a responder "no" cuando uno de sus verdugos le descubrió el rostro y le preguntó si quería decir algo.
Primera mujer ejecutada en EE. UU. por orden federal en seis décadas#LisaMontgomery era única mujer en el corredor de la muerte en el país. El Tribunal Supremo había levantado horas antes la suspensión de la ejecución decretada por un juez.#DWNoticias /eal pic.twitter.com/JOLPM2Km9H
— DW Español (@dw_espanol) January 13, 2021
"Nuestra Constitución prohíbe la ejecución de una persona que no pueda comprender racionalmente esa ejecución" (...). La administración actual lo sabe. Y la mataron de todos modos", denunció su abogada Kelley Henry, y agregó que todos los que participaron en este caso "deberían sentir vergüenza".
Montgomery, de 52 años, fue condenada en 2007 por matar en 2004 a una mujer de 23 años que estaba embarazada de ocho meses y extraerle el bebé, que luego fue recuperado sano y salvo por las autoridades.
Sus abogados argumentaron durante el proceso judicial que sufría una enfermedad mental debido a los abusos sexuales que sufrió en su infancia.
Esta ejecución, la primera de una mujer a nivel federal desde 1953, se produce a una semana de que Joe Biden asuma la presidencia de EEUU.