CorteIDH verá en febrero inédito caso contra Chile por litigio de familia con isapre MasVida
La causa alega la validación del Estado chileno de finalizar unilateral y arbitrariamente la hospitalización domiciliaria que la niña Martina Vera requería para sobrevivir.
El tribunal celebrará un período ordinario de sesiones entre el 25 de enero y el 19 de febrero, en la que también analizará casos contra Ecuador, Brasil, Colombia y Guatemala.
Es primera vez que un Estado tendrá que responder internacionalmente por falta de fiscalización a una empresa privada.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) celebrará entre el 25 de enero y el 19 de febrero de 2021 un período ordinario de sesiones, que incluye las audiencias públicas de casos contra Ecuador, Chile, Brasil, Colombia y Guatemala.
La CorteIDH, con sede en Costa Rica, informó este martes que la primera audiencia será los días 27 y 28 de enero sobre el caso Garzón Guzmán contra Ecuador. El caso se relaciona con la presunta desaparición forzada de César Gustavo Garzón Guzmán, el 9 de noviembre de 1990 en Quito, Ecuador.
Según la demanda, el hecho se habría dado en un contexto general de desapariciones forzadas cometidas por agentes estatales en contra de personas identificadas como subversivas, pertenecientes a los grupos "Alfaro Vive Carajo" y "Montoneras Patria Libre".
Posteriormente, el día 1 y 2 de febrero, el tribunal internacional verá el caso Vera Rojas contra Chile por la alegada validación del Estado de la decisión de la aseguradora de salud Isapre MásVida, de finalizar unilateral y arbitrariamente el régimen de hospitalización domiciliaria que la niña Martina Vera, diagnosticada con el síndrome de Leigh, requería de modo esencial para su supervivencia.
Lo particular de este caso es que es la primera vez que un Estado tendrá que responder internacionalmente por falta de fiscalización a una empresa privada como es una isapre, por lo que se abre un margen para litigar fuera de Chile contra las aseguradoras de salud.
BRASIL, COLOMBIA Y GUATEMALA
El 3 y 4 de febrero la Corte realizará la audiencia del caso Barbosa de Souza contra Brasil, que trata de la violación a la integridad psíquica y moral de la madre y el padre de Márcia Barbosa de Souza, quien fue presuntamente asesinada por Aércio Pereira de Lima, un exdiputado estatal.
La demanda indica que la inmunidad parlamentaria habría provocado un retraso exorbitante en el proceso penal, ya que la investigación y el proceso penal habrían durado nueve años. Además, se alega la violación a los derechos a las garantías judiciales, la protección judicial, los principios de igualdad y de no discriminación, en relación con el derecho a la vida.
Del 8 al 12 de febrero, los jueces iniciarán la audiencia del caso Integrantes y Militantes de la Unión Patriótica contra Colombia, que se basa en las sucesivas y graves violaciones de derechos humanos cometidas en perjuicio de más de 6.000 víctimas integrantes y militantes del partido político Unión Patriótica (UP) en Colombia a partir de 1984 y por más de 20 años.
El informe de la Corte explica que los hechos involucraron desapariciones forzadas, amenazas, hostigamientos, desplazamientos forzados y tentativas de homicidio en contra de integrantes y militantes de la UP, perpetrados presuntamente tanto por agentes estatales como por actores no estatales con la alegada tolerancia y aquiescencia de aquellos.
Para finalizar, la Corte verá el 17 y 18 de febrero el caso de la Masacre de la Aldea Los Josefinos contra Guatemala, que se remonta al 29 y 30 de abril de 1982, en el contexto del conflicto armado interno.
La demanda establece que integrantes de la guerrilla armados habrían entrado a la Aldea de Los Josefinos, capturando y asesinando a dos sujetos por sus alegados vínculos con el ejército. Luego de un enfrentamiento con la guerrilla, presuntamente el ejército de Guatemala habría sitiado la aldea, no dejando salir a sus habitantes.
La denuncia señala que durante la madrugada miembros del ejército dieron muerte al menos a cinco patrulleros que se encontraban en la calle, y luego comenzaron a quemar las viviendas, masacrando a sus habitantes, entrando a las casas para constatar si existían sobrevivientes y asesinando a quienes encontraban, incluyendo hombres, mujeres, niños y niñas.