"Era un día de sol muy lindo, se comenzó a secar el río y el aluvión se vino como a las cuatro de la tarde", recuerda Clotilde Yáñez, sobre lo ocurrido en Bahía Murta hace 43 años.

Fue durante la tarde del 28 de marzo de 1978 cuando la crecida repentina del río El Engaño inundó la pequeña localidad ubicada en la provincia de General Carrera, en la región de Aysén.

"Por suerte no hubo que lamentar muertes, pero se llevó los huertos, muchos animales y destrozó muchas cosas y la gente se salvó en bote, la inundación duró como dos horas", agrega Clotilde Yañez, vecina de Bahía Murta.

Según la historia contada por antiguos lugareños, durante la tarde comenzaron a sonar las campanas de la capilla de Murta y los vecinos se acercaron hasta el templo para ver qué ocurría, sin embargo, no encontraron a nadie. Fue en ese momento cuando se habría desatado el aluvión que destruyó el poblado, pero sin pasar por el sector de la capilla donde se encontraban la mayoría de los habitantes.

La consecuencia inmediata de la inundación fue que los pobladores de esta localidad tuvieran que refundar y relocalizar el pueblo, ahora en un sector alejado del río El Engaño.

Las explicaciones desde el mundo científico

Para los expertos del Centro de Investigación en Ecosistemas de la Patagonia (CIEP), lo ocurrido en Bahía Murta hace 43 años corresponde al fenómeno conocido como GLOF o vaciamiento de lagos glaciares, como lo ocurrido en los últimos meses con el Cachet II o con el lago HPN4, vinculado al glaciar Steffen.

"Es difícil adelantarse a los fenómenos de este tipo, podemos investigar e identificar lagunas con potencial de generar estos vaciamientos y también algunos factores que los gatillan, como lluvias intensas que tienen alto potencial de generar deslizamientos de laderas aledañas a las lagunas, sin embargo, podemos notar que lo ocurrido en Murta, en un día soleado, no tendría relación con las condiciones meteorológicas puntuales del día del evento", explica Íñigo Irarrazaval, doctor en Ciencias de la Tierra.

Actualmente en la Región de Aysén se desarrollan iniciativas de investigación respecto al cambio climático y el monitoreo de lagunas y sus potenciales áreas de inundación. Además, según explicán los expertos, estos cuerpos de agua vinculados ha sistemas glaciares continúan en aumento.

"Se puedan proyectar zonas de inundación y hay proyectos en ese sentido. No obstante, se necesita más estudios, porque cada vez hay más lagunas de este tipo y es necesario analizarlas individualmente. Esto se transforma en un tema de planificación territorial, socio ambiental, donde la comunidad debe involucrarse. En este sentido, Murta es un ejemplo, ya que los pobladores se reubicaron, con todo el costo que esto conlleva", agregó el geólogo Íñigo Irarrazaval, del Laboratorio Eco Climático del CIEP y la Universidad Austral de Chile.

Actualmente en la región de Aysén, comuna de Tortel, continúa vigente una alerta temprana preventiva por amenaza de desborde de la laguna Los Tempanos y el Lago Steffen, vinculado al glaciar del mismo nombre ubicado en campos de hielo norte.