Burkesuchus Mallingrandesis: El "abuelo" de los cocodrilos descubierto en la Región de Aysén
Expedición conformada por científicos chilenos y argentinos descubrió entre las rocas los huesos de la nueva especie de unos 148 millones de años de antigüedad.
Burkesuchus tenía el tamaño de un lagarto y no superaba los 70 centímetros de largo.
Su nombre es un homenaje a Coleman Burke (1941-2020) apasionado de la paleontología crucial en las expediciones del equipo.
Una expedición de científicos chilenos y argentinos dejó al descubierto en rocas de la cordillera de Mallín Grande, comuna de Chile Chico, Región de Aysén, una nueva especie de cocodrilo prehistórico .
Se trata del Burkesuchus Mallingrandesis, especie que ocupa un lugar clave en la historia de estos animales que aparecieron a comienzos del período jurásico, y cuya descripción fue publicada en la revista Scientific Reports del grupo Nature.
"Es todavía escaso el conocimiento del que disponemos, a nivel mundial, sobre aquellos cocodrilos que correteaban entre las patas de los dinosaurios. Habitaban tierra firme no superaban el tamaño de un gato doméstico. Nada conocíamos en Sudamérica de esos diminutos cocodrilos habitantes de charcos y lagunas, hasta que dimos con los restos del Burkesuchus", explicó el doctor Fernando Novas, investigador del Conicet y jefe del Laboratorio de Anatomía Comparada y Evolución de los Vertebrados (LACEV) del Museo Argentino de Ciencias Naturales.
El hallazgo fue realizado en un yacimiento de Mallín Grande, mismo lugar donde se descubrió el Chilesaurus Diegosuarezi en 2004, hallazgo que derivó en numerosas exploraciones en la Región de Aysén, lideradas por el doctor Manuel Suárez y Rita de la Cruz, de la carrera de Geología de la Universidad Andrés Bello y del Servicio Nacional de Geología y Minería, respectivamente.
En 2014, los geólogos con la colaboración del Laboratorio de Anatomía Comparada y Evolución de los Vertebrados, visitaron nuevamente la zona y la suerte hizo que descubrieran los restos del Burkesuchus.
"El primer día de prospección fue realmente inolvidable", recuerda Marcelo Isasi, técnico del LACEV, "estábamos muy entusiasmados ya que en un área de no más de 100 metros de largo dimos con varios esqueletos articulados de Chilesaurus. De repente Federico Agnolín, investigador del LACEV, gritó ¡encontré un cocodrilo!, y todos salimos corriendo hacia él. Cuando llegamos vimos que se trataba de diminutos huesos expuestos en la superficie de la roca", precisó.
Tras el descubrimiento, las rocas debieron ser trasladadas desde el lugar, de complejo acceso, para lo que fue escencial la colaboración del baqueano, Eliberto Leichtle, propietario del predio, y Álvaro Saldivia, ambos de Mallín Grande. Luego los bloques de roca fueron transportados a Santiago y, con los permisos necesarios, enviados al Museo de Buenos Aires para su preparación y estudio.
"Los últimos años han sido testigos del auge que la paleontología del mesozoico ha tomado en Chile, y animales como el Chilesaurus y el Burkesuchus ayudarán a cambiar nuestro entendimiento sobre la evolución de los reptiles que dominaron la tierra en la Era Mesozoica", agregó el doctor en Geólogía de la Universidad Andres Bello, Manuel Suárez.
El Burkesuchus Mallingrandesis o "Cocodrilo de Burke procedente de Mallín Grande" fue bautizado como homenaje al estadounidense, Coleman Burke (1941-2020), amante de la Patagonia y un apasionado por la paleontología, que jugó un rol fundamental en las expediciones y descubrimientos realizados por el laboratorio argentino.