¿Y el laboratorio de Fort Detrick?
"Lo que Estados Unidos realmente pretende hacer es eludir la responsabilidad por su fracaso en la respuesta a la pandemia y hacer de China un chivo expiatorio".
Por: Embajador de China en Chile, Niu Qingbao
El 27 de agosto se publicó la versión pública del informe de trazabilidad del coronavirus, elaborado por los servicios de inteligencia de EE.UU. El informe se basa en la especulación atacando a China de ser "no transparente" y "no cooperativa" en la prevención y el control epidémico y la trazabilidad, e insiste obstinadamente en difundir de manera sensacionalista la "teoría de una fuga del Instituto de Virología de Wuhan".
El propio exsecretario de Estado de EE. UU., Mike Pompeo, confesó: "Yo era el director de la CIA. Mentimos, engañamos y robamos. Teníamos hasta cursos de entrenamiento. Eso le recuerda de la gloria del experimento americano". Con un tubo de "detergente", Estados Unidos lanzó la guerra de Irak, con un video de los "Cascos Blancos", emprendió ataques aéreos contra Siria y realizó las escuchas telefónicas en todo el mundo, incluidos los líderes de sus aliados. Los servicios de inteligencia de Estados Unidos siempre tienen un pésimo historial. La utilización de los servicios de inteligencia para investigar la seria y compleja cuestión científica de la trazabilidad del origen del virus es una continuación de su práctica habitual, una burla a la ciencia y un engaño al mundo.
El informe acusa a China de ser "no transparente" y "no cooperativa". Al contrario, los hechos son: Wuhan informó de su primer caso sospechoso el 27 de diciembre de 2019, y China notificó a la OMS el día 31. A partir del 3 de enero de 2020, China periódicamente informó a la OMS y otros países, incluido EE. UU. En cuanto a la cuestión de la trazabilidad, China es el primer país en invitar y cooperar con la OMS en materia de la trazabilidad. Invitó a expertos de la OMS a visitar China en dos ocasiones. Especialmente el grupo de expertos de la OMS y los expertos chinos realizaron un estudio conjunto de 28 días sobre trazabilidad entre enero y febrero de 2021. El equipo de expertos fue a todos los lugares que quería visitar, y vio a todas las personas que quería conocer y logró todas las informaciones que quería tener. Finalmente se concluyó que "es extremadamente improbable una fuga de laboratorio", y esta conclusión ha sido ampliamente reconocida por la comunidad internacional. Por supuesto, dicho informe, basado en hechos y en la ciencia, no satisface los deseos de los EE.UU.
Fue el propio Estados Unidos que es el país "no transparente" y "no cooperativo". Entre el verano y otoño de 2019, se detectaron casos inexplicables de enfermedades respiratorias en Virginia, el brote masivo de lesiones pulmonares asociado al uso de productos de cigarrillos electrónicos en Wisconsin y Maryland, y enfermedades respiratorias inexplicables que causaban neumonía en dos residencias de ancianos cerca de Detrick. Muchos estadounidenses, incluido el alcalde de Belleville de Nueva Jersey, Michael Melham, creían que habían contraído el Covid-19 entre el otoño e invierno de 2019. Incluso algunos estadounidenses que se creía que murieron de gripe dieron positivo por la Covid-19 en el diagnóstico post mortem. El gobierno de EE.UU. no ha aclarado al mundo las dudas anteriores. Además, EE.UU. realizó una serie de ejercicios, simularon la propagación de un virus respiratorio entre enero y agosto de 2019. ¿Cómo pudo prever el brote y predecirlo con exactitud? EE.UU. comenzó a investigar la vacuna contra coronavirus ya en enero de 2020. En ese momento, EE.UU. no había anunciado su propia situación epidémica. ¿Cuándo y dónde obtuvo EE.UU. las cepas necesarias para investigar y desarrollarla vacuna?
La trazabilidad científica ha demostrado que la fuga del laboratorio es "altamente improbable", así que ¿cuál es el lugar más probable? Hay varias pistas para que el mundo conozca:
En primer lugar, Estados Unidos fue el primero en iniciar estudios de virus recombinantes y cuenta con la mayor capacidad en esta área. También ha financiado y llevado a cabo más que ningún otro país estudios de coronavirus. Según se informó, el catedrático Ralph Baric de la Universidad de Carolina del Norte ya empezó a realizar estudios de virus recombinantes en 1990, y su grupo dispone de una capacidad muy madura de recombinar y modificar coronavirus desde hace mucho tiempo. El mismo catedrático Ralph Baric dijo en una entrevista con el programa de televisión italiano Presa Diretta en septiembre de 2020 que es capaz de modificar artificialmente virus "sin dejar rastro". En realidad, para aclarar si los estudios de coronavirus pueden crear o no, o han creado o no el coronavirus que causa la Covid-19, basta con investigar al grupo de Baric y su laboratorio.
En segundo lugar, Estados Unidos es el país que ha realizado más actividades biomilitares del mundo. La base de Fort Detrick es el campamento base de las actividades biomilitares de Estados Unidos. Después de la finalización de la Segunda Guerra Mundial empleó a ShirōIshii, jefe del Escuadrón 731y criminal de guerra de clase A, como su asesor de armas biológicas, protegiéndolo para escapar del juicio de la justicia. Según se informó, la base de Fort Detrick también tenía un mal historial de colaborar con la Alemania nazi. A partir de 2003 ya dispone de una capacidad muy madura de recombinar y modificar coronavirus. Sufrió graves accidentes de bioseguridad y fue cerrado en 2019 por el CDC. Poco después, una enfermedad con síntomas similares a los de la Covid-19 estalló en Estados Unidos.
De hecho, la comunidad internacional ha expresado desde hace mucho tiempo sus preocupaciones por la base de Fort Detrick. Expertos de muchos países, incluido Stephen Kinzer, investigador principal del Instituto Watson de Asuntos Internacionales y Públicos de la Universidad de Brown, han pedido una investigación de trazabilidad en Fort Detrick. Recientemente China también entregó al director general de la OMS, Tedros Adhanomdos non papers, a saber, Dudas sobre Fort Detrick (Instituto de Investigación Médica de Enfermedades Infecciosas del Ejército de Estados Unidos y la Investigación de coronavirus realizada por el grupo de Ralph Baric en la UNC), así como una carta abierta firmada conjuntamente por más de 25 millones de internautas para exigir una investigación sobre la base de Fort Detrick. Sin embargo, la parte estadounidense siempre ha guardado silencio ante las dudas mencionadas y se ha hecho la vista gorda ante el llamado internacional de la justicia.
Estados Unidos recurrió a servicios de inteligencia para llevar a cabo una investigación sobre la trazabilidad del virus basándose en la presunción de culpabilidad de China. Lo que Estados Unidos realmente pretende hacer es eludir la responsabilidad por su fracaso en la respuesta a la pandemia y hacer de China un chivo expiatorio, desviar la atención de la comunidad internacional de lo "no transparente" y "no cooperativo" de Estados Unidos en la lucha antiepidémica y la trazabilidad. ¿Cuándo abrirá la parte estadounidense la base de Fort Detrick y sus más de 200 laboratorios biológicos en el extranjero, así como la Universidad de Carolina del Norte para que los científicos de todo el mundo realicen múltiples rondas de investigaciones exhaustivas?