Torrealba afronta nueva investigación: triangulaciones de dinero mediante "personal fantasma"
El ex alcalde de Vitacura, en la mira por presunto fraude de subvenciones y malversación de caudales públicos, es ahora indagado por lavado de activos.
La Fiscalía decretó la reserva de la causa penal por seis meses.
El Ministerio Público amplió la investigación penal que sigue en contra del histórico ex alcalde de Vitacura, Raúl Torrealba (1996-2021), a quien ahora se le perseguirá también como presunto autor del delito de lavado de dinero mientras pertenecía al municipio.
Hasta el momento la indagatoria en contra del ex militante RN -y que afecta a otras personas- estaba sólo caratulada bajo los ilícitos de fraude de subvenciones y malversación de caudales públicos, en el marco de diligencias por supuestas irregularidades en el pago de subvenciones a los programas Vita.
Dicha investigación comenzó luego de que la alcaldesa Camila Merino (Evópoli) detectara diferencias en la firma de Domingo Prieto, ex presidente y representante legal del Consejo Local de Deportes de Vitacura y ex representante de Vita Salud y Vita Deportes.
No obstante, recientes interrogatorios dieron pie al fiscal jefe de Santiago, Francisco Jacir, a invocar la Ley 19.913, cuyo artículo 31 sanciona las conductas de lavado de activos a quien "de cualquier forma oculte o disimule el origen ilícito de determinados bienes, a sabiendas de que provienen, directa o indirectamente, de la perpetración de hechos constitutivos" de algunos de los delitos base estipulados en esta normativa, según consignó La Tercera.
Junto con ello, el ente persecutor decretó la reserva de la causa penal durante seis meses.
De acuerdo al rotativo, la Fiscalía tomó la decisión de abrir una nueva arista luego de testimonios que apuntan a triangulaciones de dinero a través de "personal fantasma": profesionales que en los registros aparecen emitiendo boletas para las corporaciones indagadas por presunta corrupción y que presuntamente no prestaron servicios alguno.
El fiscal Jacir busca establecer si estos testaferros eran obligados después a devolver estos dineros -que provenían del presupuesto municipal de Vitacura- y a manos de quien llegaron.