Científicos chinos sintetizan por primera vez almidón a partir de dióxido de carbono
Este almidón sintético podría ser más rentable que los cultivos tradicionales, puesto que se podría ahorrar "el 90 por ciento de la tierra cultivable necesaria".
Un grupo de científicos chinos sintetizó almidón a partir de dióxido de carbono por primera vez en el mundo, informan medios locales.
El estudio fue llevado a cabo por el Instituto de Biotecnología Industrial de Tianjin, de la Academia de Ciencias de China, y ha sido publicado en la revista Science.
Según el Instituto, el almidón "es uno de los ingredientes más importantes" de la alimentación humana y requiere para su obtención "una gran cantidad de tierra, agua dulce y otros recursos, así como materiales de producción agrícola como fertilizantes y pesticidas".
El estudio demuestra que este almidón sintético de dióxido de carbono podría ser más rentable que los cultivos tradicionales, puesto que se podría ahorrar "el 90 por ciento de la tierra cultivable necesaria", además de "reducir el impacto de los fertilizantes y pesticidas" en el entorno.
En comparación con el maíz, una de las fuentes más habituales de este nutriente, la tasa de síntesis de almidón mediante esta forma artificial es 8,5 veces superior, según el estudio.
El Instituto creó hace seis años un grupo de trabajo exclusivamente dedicado al desarrollo de proyectos relacionados con el almidón sintético.
Según declaraciones del Instituto, Ma Yanhe, recogidas en medios locales, "durante mucho tiempo, los investigadores han intentado mejorar el proceso de la fotosíntesis, con la esperanza de aumentar la tasa de conversión de dióxido de carbono y la eficiencia de la utilización de la energía lumínica", logro que permite a su grupo "mejorar la eficiencia de producción de almidón".
En septiembre, el presidente chino, Xi Jinping, fijó el objetivo chino de alcanzar el pico de emisiones de carbono antes de 2030.
China es el país responsable de la mayor cantidad de emisiones de dióxido de carbono del mundo (27 % del total global en 2017, según el Global Carbon Atlas).