Consorcio chino-alemán se quedó con la licitación de pasaportes y cédulas chilenos
El Registro Civil adjudicó contrato por 10 años al conglomerado conformado por Aisino y Muhlbauer, que presentó la oferta más conveniente para el Estado.
El controvertido proceso de licitación para el desarrollo, fabricación y soporte de las nuevas cédulas de identidad y pasaportes al fin tiene un ganador. El Registro Civil e Identificación anunció que el contrato fue adjudicado al conglomerado chino-alemán conformado por las empresas Aisino y Mühlbaue, que presentó la oferta más conveniente al Estado: una suma de 205 millones de dólares.
En el comunicado donde se informó la decisión, el organismo indicó que "este nuevo modelo ha sido desarrollado para los próximos diez años y reemplazará al actual, vigente desde el año 2012".
El cambio en la producción de estos documentos traerá que las cédulas de identidad disminuirán su valor en un 20 por ciento y los pasaportes verán rebajado su precio a la mitad, aseguró el Registro. "Así, los chilenos contarán con documentos de identificación con mayor calidad y seguridad, del más alto nivel mundial, y a un menor costo", destacó.
Según detalló el servicio, la convocatoria internacional para la licitación fue elaborada "bajo estándares OCDE y estricta sujeción a nuestro ordenamiento jurídico, fueron aprobadas por la Contraloría General de la República, lo que permitió la recepción final de 5 propuestas, elaboradas por distintos consorcios, que integran empresas de 8 países".
En relación a la seguridad y protección de información personal, el Registro aseguró que la red, el data center y la base de datos quedan bajo su propiedad y administración, además de los computadores y periféricos.
La fabricación de los documentos "se realizará en dependencias del servicio, sin intervención humana, mediante la interpretación del código en clave que recibe. Esta información es temporal y se elimina automáticamente del sistema, inmediatamente que se realiza la impresión del respectivo documento", explicó.
Esto último, ante las polémicas que a las que ha estado sujeto el proceso, específicamente por las dudas que ha generado que una compañía del gigante asiático esté a cargo de documentos y datos sensibles de todos los chilenos.
En ese sentido, el Registro subrayó que el nuevo modelo "contempla la máxima calidad y requerimientos técnicos en materia de identificación, con los mayores estándares de seguridad y confidencialidad a nivel mundial, con una significativa reducción de los costos para el Estado de Chile y especialmente para la ciudadanía".