Plan Cóndor: Italia dicta sentencia al dictador de Perú y a militar brasileño
Italia empezó a investigar hace dos décadas el asesinato y desaparición de varios italo-latinoamericanos en el Plan Cóndor y en 2007 pidió el arresto de 146 militaresitares de las Juntas de Bolivia, Chile, Perú y Uruguay.
Dentro de las sentencias previas del tribunal hay tres chilenos involucrados por lazos con la dictadura.
El Tribunal Supremo de Italia emitirá este martes dos sentencias relacionadas al Plan Cóndor, la operación represiva en América Latina en la década de los 70's.
Una de ellas es sobre el ex dictador peruano Francisco Morales Bermúdez y la otra respecto al militar brasileño Átila Rohrsetzer.
El tribunal se reunirá para emitir una sentencia sobre Morales Bermúdez, cuyo caso fue separado de la causa general del Plan Cóndor en el país. Italia imputó a decenas de militares Bolivia, Chile, Perú y Uruguay la desaparición de ciudadanos con nacionalidad italiana en dicha operación.
Por su parte, en julio pasado, el tribunal italiano separó de la causa general los casos de tres imputados peruanos, el ex dictador entre 1975 y 1980, Morales Bermúdez y los del general de división Germán Ruiz Figueroa y el coronel Martín Martínez Garay. Tras la muerte de estos dos últimos, únicamente emitirá sentencia sobre el primero.
Por otro, el tribunal ordinario de Roma dictará un veredicto de primer grado sobre el brasileño Átila Rohrsetzer, por la detención y entrega de dos militantes argentinos en 1980, cuando era director de la División Central de Informaciones de Río Grade do Sul, en la frontera con Argentina y Uruguay.
En caso de ser condenado se convertiría en el primer militar de brasileño en recibir una pena por el Plan Cóndor, debido a que la Ley de Amnistía de 1979 impide investigar y juzgar las torturas, desapariciones y ejecuciones del régimen militar (1964-1985).
El primer caso que se le imputa es el asesinato del militante ítalo-argentino de los montoneros, Lorenzo Viñas Gigli, de 25 años, en 1980, cuando escapaba de Argentina para volar a Italia, donde se encontraba su madre Adelaide.
El otro caso es el de Horacio Campiglia, otro montonero que fue secuestrado junto a Mónica susana Pinus de Binstock en marzo de 1980 en el aeropuerto de Río de Janeiro y extraditado a Argentina, donde se le vio en el centro de detención clandestina de "Campo de Mayo".
Los militares brasileños acusados por estos homicidios eran cuatro, pero tres de ellos murieron por lo que Rohrsetzer será el único imputado.
Italia empezó a investigar hace veinte años el asesinato y desaparición de varios italo-latinoamericanos en el Plan Cóndor y en 2007 pidió el arresto de 146 militares de las Juntas de Bolivia, Chile, Perú y Uruguay.
El paso del tiempo y la muerte, así como la falta de permiso para proceder de Argentina contra sus militares, redujo notablemente la lista de imputados, aunque en julio el tribunal italiano confirmó la cadena perpetua a catorce de ellos, once uruguayos y tres chilenos.
Los tres chilenos condenados son Pedro Espinoza, miembro de la policía secreta de Pinochet, el militar Daniel Aguirre Mora y el ex funcionario de la Policía de Investigaciones, Carlos Luco Astroz.
Los uruguayos imputados son Troccoli, José Ricardo Arab Fernández, Juan Carlos Larcebeau Aguirregaray, Pedro Antonio Mato Narbondo, Ricardo José Medina Blanco, Ernesto Abelino Ramas Pereira, José Sande Lima, Jorge Alberto Silveira Quesada, Ernesto Soca, Gilberto Vázquez Bissio y Juan Carlos Blanco.