Conflicto con Bielorrusia: Polonia denunció "propaganda para despertar emociones"
“Niños pequeños están siendo usados cínicamente como su cara visible", según autoridades polacas.
El conflicto fue calificado como una "crisis política, no migratoria" por el primer ministro polaco.
Esta propaganda se suma a numerosos hechos que han marcado la relación entre los dos países vecinos.
El gobierno polaco se pronunció respecto a las imágenes de niños acampados en la frontera y las consideró como parte de una campaña bielorrusa de "propaganda para despertar emociones" y observó con preocupación el incremento de migrantes concentrados en la zona.
La Guardia Fronteriza polaca publicó este viernes un mensaje denunciando que "los niños son expuestos para despertar más emociones", junto a tres videos que muestran a soldados bielorrusos supuestamente indicando a migrantes acampados que coloquen a los niños cerca de la valla fronteriza.
"Más instrucciones de los servicios bielorrusos, más grabaciones de propaganda", decía el mensaje.
El vocero del Ministerio de Servicios Especiales polaco, Stanilaw Zaryn, ya había afirmado este jueves en Twitter que "los inmigrantes se han embarcado hoy en una campaña de propaganda en la que los niños juegan un papel principal".
Junto a videos grabados por las fuerzas de vigilancia polacas, Zaryn mencionó que "en una de las escenas preparadas como parte de esta campaña aparece un niño que ya fue visto en actos similares la semana pasada".
Además, se refirió a unas fotografías en las que niños sostienen carteles con la palabra "sorry" (perdón en inglés), como "una iniciativa para pedir disculpas a Polonia por la destrucción de una alambrada y los actos de agresión contra las tropas polacas en la frontera".
"El lanzamiento de esta campaña estuvo precedido de meticulosos preparativos; niños pequeños están siendo usados cínicamente como su cara visible", añadió Zaryn, cuyo ministerio coordina las acciones en la crisis que se vive en la frontera desde hace meses.
El titular describió que "entre los inmigrantes también hay propagandistas cuya tarea es preparar las 'narrativas' apropiadas para el uso de los medios tanto en Polonia como en el extranjero".
Zaryn publicó este viernes otro mensaje en redes sociales en el que afirmó que los migrantes que acampan junto a la frontera en territorio bielorruso "son abastecidos regularmente" por aquel país.
Para apoyar esta afirmación compartió fotografías de un paquete de galletas de marca bielorrusa junto a la imagen de unos niños en la zona.
Hace pocos días, el ex viceministro de Ciencia polaco Wojciech Szewko comentó en la televisión nacional polaca las imágenes de niños llorando en los campamentos fronterizos emitidas por el canal bielorruso Belsat y afirmó que "les ponen cigarros en los ojos, les ensucian y les dicen que se abracen a sus madres" para causar un mayor impacto.
"CRISIS POLÍTICA, NO MIGRATORIA"
Al mismo tiempo, las autoridades militares alertan de que el número de personas asentadas en el lado bielorruso han aumentado, y Paweł Soloch, jefe de la Oficina de Seguridad Nacional, afirmó este viernes que "la situación es muy tensa, muy cambiante y en los próximos días sólo se puede esperar una escalada".
Asimismo, la oficial de la Guardia Fronteriza polaca Katarzyna Znadowicz afirmó que "un grupo de unas 40 personas, casi todas niños y mujeres" fue transportado durante la noche del jueves cerca de la frontera alambrada por los bielorrusos.
El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, se refirió hace pocos días a la situación en la frontera con Bielorrusia como a "una crisis política, no migratoria, como puede parecer desde la distancia".
Además, el gobierno polaco envió hace unas semanas varios convoyes de ayuda humanitaria con alimentos, ropa y material sanitario a la frontera con Bielorrusia, donde se les denegó la entrada en reiteradas ocasiones.
Según estimaciones de la Guardia de Fronteras polaca, ha habido más de 32.000 intentos de infiltración irregular desde Bielorrusia en lo que va de año, de los cuales más de la mitad se produjeron en el último mes.
El gobierno polaco calificó de "guerra híbrida" la situación y acusó al régimen de Lukashenko de fomentar la concurrencia de personas desde países como Irak o Siria a las fronteras polaca, letona y lituana.
La Unión Europea (UE) planea solicitar la cooperación de los países de origen de estas personas para atenuar el problema y amenazó con incrementar las sanciones contra Bielorrusia.