Senado dilata la aprobación de matrimonio igualitario y lo envía a comisión mixta

El proyecto de ley de matrimonio igualitario será debatido la próxima semana luego de que este martes, en su último trámite antes de ser votado por el pleno del Senado, la Comisión de Constitución de la Cámara Alta no llegara a acuerdo y dilatara el proceso al enviar la iniciativa a comisión mixta.

Diversos colectivos de la diversidad sexual, que esperaban que hoy se llevara a cabo la votación y la eventual aprobación del proyecto, catalogaron lo sucedido como "lamentable".

La moción, que tiene carácter de suma urgencia en la discusión parlamentaria por indicación del Presidente Sebastián Piñera, pasará a ser tratada el próximo lunes en una Comisión Mixta integrada por miembros de la Cámara de Diputados y de la instancia de Constitución del Senado.

En concreto, esta tarde se votó todo el articulado salvo tres puntos en discordia derivados de su paso por la Cámara Baja, resultando con 33 votos a favor y uno en contra, que corresponde al UDI Iván Moreira.

"Lo que se optó por mandar hacia comisión mixta tiene que ver con algunas enmiendas introducidas por la Cámara a este proyecto, que pueden inducir a errores y eventuales conflictos interpretativos", explicó después de la sesión el presidente de la Comisión de Constitución, Pedro Araya (Ind).

"Se planteó la duda de que la supresión de los textos que hizo la Cámara podía abrir la puerta a lo que se denomina el vientre de alquiler, un tema que fue largamente discutido en la comisión y que en su minuto no tuvo consenso, por estimarse que debía ser materia de un proyecto distinto", detalló el senador.

"Asimismo, se introdujeron otros temas que no fueron analizados en su oportunidad por la Comisión de Constitución, como por ejemplo, aquellas normas relativas a la Ley 21.120, que reconoce y da protección al derecho a la identidad de género, y también normas relativas a la protección de la maternidad, regulada en el Código del Trabajo", consignó.

La gremialista Luz Ebensperger se pronunció sobre el aspecto de identidad de género señalando que "lo que se hizo modificando la Ley de Cambio Registral de Sexo no me parece, o sea, no puede dejar de ser ante el Tribunal de Familia, cuando una persona en un matrimonio ya existente quiere cambiar su identidad de género".

Por su parte, durante el debate, Araya advirtió que "me hace ruido" que se dé "un plazo de tres meses para implementar la ley. O sea, todos hemos visto lo colapsado que está el Registro Civil, hemos visto los problemas, lo que se han demorado en dictar reglamentos e implementar otras leyes que están vigentes".

"Entonces, esos tres meses ¿son un plazo razonable y que van a poder cumplir? ¿O lo están haciendo para decir: 'cumplimos, aquí está la ley', y en tres meses más pedir un plazo superior?", preguntó a los demás senadores.

IGUALES CRITICA EVENTUAL "USO ELECTORAL" DEL PROYECTO

"Lo que pasó hoy en la Comisión de Constitución es inaceptable. Lo cierto es que los senadores establecieron que habían ciertos puntos que les generaban dudas y que les parecía importante discutir, sin embargo, no se discutió ningún punto y se estableció inmediatamente que pasaría a una Comisión Mixta", señaló la directora ejecutiva de Fundación Iguales, Isabel Amor.

"Tememos que se esté usando el proyecto de matrimonio igualitario con fines electorales y es importante recalcar que detrás de este proyecto hay personas, hay familias, derechos humanos y compromisos internacionales que el Estado de Chile debe honrar", agregó Amor, haciendo referencia a la campaña por los comicios presidenciales que se da en el país en este momento.

Para la activista, "es preocupante haber presenciado cómo los senadores y senadoras manifiestan su preocupación sin siquiera tener una discusión en que se les pudiese explicar o dar tranquilidad respecto a lo que consideraban que debía discutirse, y que obliga a pasar este trámite a una mixta".

La vocera del Movilh, Javiera Zúñiga, sostuvo que "hoy la Comisión de Constitución del Senado ha dado la espalda a los derechos LGBTIQ+, en tanto, ha cedido a versiones homo/transfóbicas para posponer la votación del proyecto de ley, alejado de toda técnica y rigurosidad jurídica. Es una vergüenza: esta Comisión han jugado con las esperanzas y los derechos humanos de familias y personas que hoy queríamos dar un paso hacia la igualdad. Para ellos/as será un tema de días, para nuestros derechos humanos es un deuda de décadas".

Zúñiga añadió que "la Comisión de Constitución del Senado ha cedido a un conservadurismo minoritario y han traicionado al movimiento social. Nada de lo que se argumentó hoy es cierto: el proyecto de ley no innova en términos de vientres de alquiler, es más ese es un término que la iniciativa ni menciona, ni tampoco modifica la ley de identidad de género en ningún aspecto ajeno al matrimonio, como se indicó hoy como excusa en una Comisión que se negó a dar la voz a los movimientos LGBTIQ+ para que expusieran su punto de vista. Hasta censura hubo".

"Si bien para los parlamentarios es una dilación de solo algunas semanas, para nosotros como comunidad LGBTIQA+ es una espera de años, es una deuda histórica para alcanzar la igualdad de derechos", remató.

GOBIERNO ESPERA FINALIZAR TRAMITACIÓN LA PRÓXIMA SEMANA

Por su parte, la ministra de Desarrollo Social, Karla Rubilar, que asistió a la sesión de la comisión senatorial, señaló que la voluntad del Ejecutivo era despachar el proyecto con urgencia y que espera el término de la tramitación la próxima semana.

Acompañada de la subsecretaria de Derechos Humanos, Lorena Recabarren, Rubilar apuntó a que existía "toda la disposición para aclarar punto por punto las dudas, manifestar qué es lo que también creen las organizaciones, que es un imperativo poder avanzar, ojalá el día lunes, hasta total despacho, y sacarlo a la brevedad".

El proyecto, que se espera quede programado para su debate y votación en el hemiciclo senatorial el próximo martes, es una de las mayores luchas de los colectivos LGTBI en Chile, donde las personas homosexuales solo pueden unirse bajo la figura del Acuerdo de Unión Civil (AUC), que no reconoce derechos filiativos.

De aprobarse, Chile se convertiría en el octavo país de América Latina en legalizarlo después de Argentina, Brasil, Colombia, Uruguay, Ecuador, Costa Rica y varios estados de México.