Homicidas de adolescente son condenados a 20 años: Hay relación con polémica animita de Rinconada
En febrero de 2019, Javiera Rocha Palma (21) murió en un accidente de tránsito. Un año y medio después, sus familiares dispararon en 18 ocasiones al joven (17) que conducía.
El tribunal estableció que hubo alevosía, pues antes de acribillar al joven, la familia de la joven había perdonado al conductor, estableció la sentencia.
Medios locales difundieron ampliamente la controversia.
El Tribunal Oral de San Felipe sentenció a 20 años de cárcel a los condenados Miguel Fuentes Araneda (30) y Michael Aguilera Rocha (26), considerados culpables del homicidio calificado de Jan Fuentealba, un adolescente de 17 años que en julio de 2020 recibió cerca de 18 disparos por los ahora condenados, quienes –según Fiscalía- actuaron concertados.
Al momento de los hechos, se difundió la información que todo tenía que ver con un ajuste de cuentas entre las partes. En ese sentido, en el juicio oral se reveló que los autores del crimen habrían arremetido contra la víctima por ser el responsable de la muerte de Javiera Rocha Palma, de 21 años, hecho ocurrido en febrero de 2019 en Rinconada.
Javiera murió en un accidente de tránsito luego de evadir un control de Carabineros y darse a la fuga junto a dos personas más, quienes se trasladaban en un auto sin patente, convirtiéndose también en un caso mediático.
Lo anterior, debido a una animita de grandes dimensiones que construyeron sus cercanos, pues los vecinos del sector reclamaban que en el lugar se convocaba mucha gente para efectuar celebraciones, diabladas, lanzar fuegos artificiales, disparar, entre otras situaciones que generaban una ocupación de la calzada y la inseguridad de los residentes.
En sus alegatos de apertura Fiscalía hizo referencia al fatal accidente de Javiera: "quien conducía este vehículo era justamente la víctima, nace así en la familia Rocha el odio u odiosidad a la persona de Jan Fuentealba Bravo".
"El 12 de julio, no fue un día cualquiera para la víctima toda vez que horas antes de su deceso fue visitado por parte de la familia Rocha, Martina Palma - madre de la fallecida – Patricia y Patricio -ambos Rocha Palma y hermanos de la fallecida. (...) En lo concreto y según refirió un testigo de la Defensa le habrían dado un abrazo a Jan, dando a entender que estaba todo fue superado (...)esto hace que el adolescente Jan Fuentealba baje la defensa, pues él ya entendía que se había superado el problema y por ello concurre a la casa de los Rocha de El Vergel 776, donde finalmente le dan muerte", dijo la Fiscalía en la clausura.
De ello dio cuenta el testimonio de la mamá de la víctima: "Lo fueron a buscar diciéndole que fuera a la casa, que lo iban a perdonar, que querían conversar con él, para llegar a un acuerdo, incluso Martina lo abrazó, le dio un beso y le dijo que 'el Miguel quería conversar con usted' lo embaucaron, lo engañaron y su hijo para tener un poco más de descanso y querer hacer las paces con ellos, fue y ahí lo estaban esperando". "Siempre lo atormentaron, lo buscaban, le disparaban, todos ellos, lo acecharon por muchos meses y planearon todo lo que hicieron con su hijo", dice la sentencia.
De esta manera, el tribunal condenó a los sujetos por homicidio calificado por alevosía por actuar sobreseguros.
"En atención al perdón que le habían otorgado, es que el occiso baja la guardia, se encuentra con los acusados, con los que conversa amigablemente en la calle e ingresa hasta el domicilio de Miguel Fuentes, lugar donde finalmente, encontrándose debilitada sus defensas al sentirse 'perdonado por la familia Rocha' los acusados valiéndose de esta confianza, sin la cual no se habría reunido con ellos y desarmado, le dan muerte, recibiendo a lo menos 18 impactos balísticos".