En las últimas dos semanas, el 55% de los fallecidos con Covid fueron mayores de 80 años

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Cooperativa.cl

A su vez, el 77% de los 1.676 fallecimientos reportados en los últimos 14 días representa a víctimas mayores de 70 años.

Pese a la alta vacunación, el geriatra Gerardo Fasce estimó que siguen siendo el grupo con más riesgo de fallecer debido a la gran ola de contagios.

 ATON (Archivo)

Durante esta tercera ola de Covid-19 se ha reportado un fuerte aumento en la incidencia de muerte en grupos de mayor edad, y sólo en las últimas dos semanas, el 55 por ciento de los decesos fueron de adultos de más de 80 años, de acuerdo a cifras del Ministerio de Salud.

Esto implica que de los 1.676 fallecimientos que se produjeron en los últimos 14 días, en 930 las víctimas fueron mayores de 80 años. A su vez, el 77 por ciento de ese total representa a personas sobre los 70 años, consignó El Mercurio.

Cabe destacar que estas cifras se enmarcan en febrero, mes dominado por la variante Ómicron y que también vio el ascenso de Ómicron 2, y en el cual se registró la mayor cantidad de muertes por el virus desde junio del 2021, con 2.632 decesos.

"Si bien la vacunación en adultos mayores ha sido altísima, es tan significativo el número de casos que hemos tenido y las personas más frágiles van a ser las que tengan más riesgo de fallecer", explicó al matutino Gerardo Fasce, ex presidente de la Sociedad Chilena de Geriatría y Gerontología, y estimó que "entre 30 y 50 por ciento de todas las muertes en un hospital siempre va a ser de personas mayores".

Según el facultativo, otro factor que podría influir en esta alza es que "esta población hoy es más frágil que años atrás, porque no ha tenido todos sus controles médicos; está con problemas de salud mental, con problemas nutricionales, por lo cual, cuando les toca enfrentar un cuadro de Covid-19, pese a que están vacunados, también están en un estado de vulnerabilidad mayor".

Juan Carlos Molina, geriatra de la Clínica Meds, precisó que "el descuido de sus patologías, más el fenómeno de fragilización -que es el impacto que tiene esa condición de no atención o no atención adecuada de esas comorbilidades-, hace perder mayor reserva funcional (...) Y así, su capacidad de respuesta frente a un elemento estresor o agresor, como es el Covid-19, está disminuida".