El cambio climático obliga a España a adelantar la vendimia
Una sequía prolongada y un verano extremadamente caluroso, con temperaturas del entorno de los 40 grados, a veces más, han influido para que bodegas y cooperativas empiecen antes.
Y es que las altas temperaturas aceleran la maduración, un fenómeno que comienza a ser cada vez más habitual a causa del cambio climático.
España, una potencia vitivinícola mundial, comenzó ya la vendimia, entre 10 y 15 días antes de lo habitual, lo que confirma la tendencia de los últimos años de adelantar la recolección de septiembre, el mes tradicional, a agosto debido al cambio climático.
En esta ocasión, una sequía prolongada y un verano extremadamente caluroso, con temperaturas del entorno de los 40 grados, a veces más, han influido para que bodegas y cooperativas empiecen antes.
Tanto es así que "la excepción es ya empezar en septiembre", reconoce el presidente del consejo sectorial vitivinícola de Cooperativas Agroalimentarias, Fernando Ezquerro.
Aunque este adelanto se ha dado en las variedades del fruto que maduran antes, puede ampliarse en los próximos días a todo tipo de uva.
¿La causa principal? Las altas temperaturas aceleran la maduración, un fenómeno que comienza a ser cada vez más habitual a causa del cambio climático, coinciden expertos consultados por Efe.
"Si hablamos de tendencia en las últimas décadas, sí ha habido un adelantamiento en las fechas de vendimia de manera generalizada", constata el director general de la Federación Española del Vino (FEV), José Luis Benítez.
Por el contrario, si se toma un tiempo más corto, se ve que hace apenas dos años sucedió lo contrario y hubo una vendimia húmeda y muy tardía, apunta este representante de los bodegueros.
El cambio climático ha provocado que la media de fechas de recolección se adelante, pero también ha causado "más variabilidad", de modo que se dan "años muy tempranos y otros retrasados", matiza el responsable vitivinícola de la organización de agricultores COAG, Joaquín Vizcaíno.
YA SE VENDIMIA EN CASI TODA ESPAÑA
La recogida de las variedades más tempranas ha comenzado ya de forma generalizada en prácticamente todo el país, como las blancas foráneas (chardonnay, sauvignon blanc), las tintas foráneas (syrah, merlot), y también las uvas tempranillas, blancas y tintas, las mayoritarias.
Es el caso de denominaciones de origen como Montilla-Moriles, Jerez, Cava, Rioja y La Mancha.
De hecho, en el marco de Jerez (sur de España), la vendimia se adelantó al mes de julio, algo que nunca había ocurrido.
César Saldaña, presidente del Consejo Regulador de las Denominaciones de Origen Jerez, Xérès, Sherry y Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda, lo achaca al cambio climático y al calentamiento global.
Para otras variedades más tardías, como la blanca airén o la tinta monastrell, todavía hay margen, pero la recogida también se adelantará 10 o 15 días si continúa este calor, comenta Vizcaíno, de COAG.
BUENA CALIDAD, MENOS PRODUCCIÓN
Con tanto calor, el ciclo vegetativo de la vid termina más rápidamente, pero la uva no se desarrolla tanto y los racimos son más pequeños, explica José Ugarrio, de la asociación agraria Asaja.
Sin embargo, la calidad que esperan los técnicos es buena, entre otras cosas porque la falta de humedad evita enfermedades como el mildiu y el oidio.
Según Ugarrio, este adelanto confirma los primeros pronósticos para esta campaña, que será inferior a la media de los últimos 6 años de 42 millones de hectolitros; y entre un 10 por ciento y un 15 por ciento inferior a los 39,9 millones de hectolitros del año pasado.
España es el primer país del mundo en superficie vitícola (cerca de 970.000 hectáreas), tercer productor de vino (por detrás de Francia e Italia), primer exportador en volumen y tercero en valor, según la Federación Española del Vino.