Idea de órgano mixto suma voces en la centroizquierda, pero está lejos de generar consenso
El PPD Raúl Soto y los PS Juan Luis Castro y Tomás de Rementería llaman a abrirse a una mezcla de participación ciudadana y expertos, pero en Apruebo Dignidad y la DC piden cuidar la "legitimidad de origen".
Si se opta por esta fórmula, "va a enredar las cosas y la gente va a decir que esta Constitución la hicieron los mismos de siempre", alertó Eric Aedo, jefe de la bancada falangista.
"Me habría encantado que el proceso fuera 100 % electo, pero también me encantaría jugar fútbol como Messi y no tengo las capacidades... Hoy la realidad dicta otra cosa", apuntó el diputado De Rementería.
El debate sobre la composición del eventual nuevo órgano constituyente ha entrampado las diálogos de la mesa que encabezan los timoneles del Congreso y también está generando disensos en la alianza de Gobierno.
El mecanismo mediante el cual se elaborará la nueva propuesta de Constitución se ha alzado como la gran piedra de tope en las conversaciones: el oficialismo -Socialismo Democrático y Apruebo Dignidad- y la Democracia Cristiana propusieron un "cabildo constituyente" con 90 miembros más nueve escaños reservados, mientras en la derecha abogan por 50 cupos, similar a lo que es hoy el Senado.
Pero no solo la cantidad de redactores aparece como la piedra de tope, sino también quiénes lo integrarán: mientras la oposición ha insistido en la necesidad de incorporar expertos; las coaliciones de Gobierno apuntan a que el órgano sea 100 % electo, sin embargo, voces en el Socialismo Democrátco han salido a plantear uno mixto.
"Creo que la única salida en este momento, en este punto de inflexión, para ir cerrando un acuerdo constitucional en las próximas semanas, es que todas las partes se abran a un órgano mixto que incorpore participación ciudadana a través de personas electas, y también expertos que permitan dar las certezas que requiere el futuro proceso a través de su capacidad técnica", dijo esta semana el diputado Raúl Soto (PPD), expresidente de la Cámara Baja.
Ahondó en la idea el socialista Tomás de Rementería, quien hace más de un mes fue una de los primeros en el oficialismo que habló sobre un mecanismo mixto.
"Me habría encantado que el proceso fuera 100 % electo, pero también me encantaría jugar fútbol como Messi y no tengo las capacidades. Hoy la realidad dicta otra cosa, tanto la ciudadanía como la clase política en general no está aceptando esa posición. Si emplazamos a la derecha a una posición de 80-20, 80 % electo y 20 % electo indirectamente, que puede ser más allá del Congreso, tal vez un colegio electoral, y podamos elegir hí ese 20 % (de expertos) que sean de dilatada trayectoria profesional en materias de derecho constitucional, podríamos avanzar", expuso.
Asimismo, el senador socialista Juan Luis Castro consideró en El Mercurio que "hay un componente de legitimidad que me parece que lo va a dar el plebiscito de salida y lo que hoy más se requiere es que el organismo que construya la nueva Constitución esté muy validado por expertos, por quien posee el poder constituyente, que es el Congreso, y que permita llegar a un acuerdo razonable".
"El plebiscito de salida es la expresión máxima de legitimidad ciudadana, por algo el 4-S marcó un antes y un después; entonces, teniendo en cuenta ese contexto y que estamos al límite con los plazos, puede ser perfectamente un órgano de composición mixta el que redacte la nueva Constitución", argumentó.
OTRA VOCES SOCIALISTAS, APRUEBO DIGNIDAD Y LA DC PIDEN CUIDAR "LEGITIMIDAD"
Pero en el Partido Socialista también persisten personeros que, como Apruebo Dignidad, remarcan su postura a favor de que todos los integrantes sean elegidos por la ciudadanía.
El diputado Leonardo Soto (PS) apuntó en el matutino que "una línea roja que no se debería cruzar es la de considerar que el órgano que redacte una nueva Constitución sea 100% designado o seleccionado por el actual Congreso, por una razón muy simple: hoy el Congreso tiene una de las valoraciones más bajas de su historia".
"Es una situación compleja. Tenemos que llegar a un acuerdo a la brevedad posible. Lo fundamental del proceso constituyente es establecer la legitimidad del mismo, porque debe durar al menos 30 años, y para eso tiene que estar legitimado. La única manera de hacer es con elección democrática de sus integrantes", complementó el también socialista Raúl Leiva en el citado medio.
"El desafío es respetar el mandato para que sea 100 % electo, para que tenga legitimidad de origen y no se convierta en un pacto entre cúpulas políticas. Hacemos un llamado a la derecha a cumplir la palabra empeñada. Si hay quienes quieren atribuirle al Congreso el poder constituyente, que le expliquen a Chile por qué es mejor que los senadores designen a dedo y no lo haga la ciudadanía", sostuvo a su turno el diputado Diego Ibáñez, presidente del frenteamplista partido Convergencia Social.
Misma posición en la que se mantiene la DC, tienda que, aunque no es oficialista, acompañó la propuesta del sector sobre los 99 escaños.
"Creo que el órgano constituyente debe ser elegido 100 % por la ciudadanía, me parece que esta alternativa de hacerlo mixto en el mediano plazo va a enredar las cosas y la gente va a volver a decir que esta Constitución que queremos escribir la hicieron los mismos de siempre", opinó Eric Aedo, jefe de la bancada falangista.
Este viernes no habrá reunión de la mesa de diálogo ampliada de las fuerzas políticas con representación parlamentaria.
En el encuentro del martes, los participantes de las negociaciones acordaron formar una nueva comisión de expertos compuesta por técnicos conocedores del sistema electoral, que serán designados por los partidos en los próximos días, cuya finalidad será proponer una fórmula a los negociadores.