Chile y la Unión Europea cerraron políticamente el acuerdo para modernizar su pacto comercial
"Tiene un capítulo sobre género y comercio, además de uno especial en materia medio ambiente", valoró la ministra de Relaciones Exteriores, Antonia Urrejola.
También recordó que "trae un conjunto de beneficios arancelarios y todos aquellos temas que son muy importante para exportadores, como también para atraer inversión".
La Unión Europea y el Gobierno de Chile cerraron políticamente este viernes el acuerdo para modernizar el pacto que desde 2003 rige sus relaciones comerciales, tras cinco años de negociaciones entre ambas partes, el que -según destacó la ministra de Relaciones Exteriores, Antonia Urrejola- será "líder" en varias materias, entre ellas género, comercio y medio ambiente.
"En este acuerdo creo que es importante recalcar, porque siempre en el debate lo que se ve respecto al acuerdo con la Unión Europea es un acuerdo comercial y si, es un acuerdo, un tratado de libre comercio que trae un conjunto de beneficios arancelarios y todos aquellos temas que son muy importante para exportadores, como también para atraer inversión a Chile", valoró la canciller en una rueda de prensa en Bruselas junto al alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, y el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis.
De todas maneras, la autoridad hizo énfasis en que se trata de "una modernización del acuerdo de la Unión Europea y desde esa perspectiva, almorzando con algunas eurodiputadas, se señala que esto es un acuerdo que va a ser líder en varias materias. Por ejemplo, tiene un capítulo sobre género y comercio, además tiene un capítulo especial en materia medio ambiente".
"El actual acuerdo con la Unión Europea no tiene normas en materia de medio ambiente donde se lean los estándares en términos ambientales. Tiene además un capítulo en derechos laborales y ahí la implementación de los convenios de la OIT, algo que el Gobierno Presidente Boric ha estado haciendo", puntualizó la secretaria de Estado.
Finalmente, señaló que esta modernización del acuerdo Chile-UE, que rige desde el año 2002, "tiene un capítulo también en materia de derecho digital, de compra pública. Es un acuerdo comprensivo en materia de derechos humanos".
En Bruselas, la Canciller @UrrejolaRREE, junto a la Embajadora de @MisionChileUE, Gloria Navarrete, participaron en un almuerzo de trabajo con eurodiputadas y la Embajadora para Género y Diversidad del Servicio Europeo de Acción Exterior. pic.twitter.com/nNhGMP6Up8
— Cancillería Chile 🇨🇱 (@Minrel_Chile) December 8, 2022
"Lo de hoy es un momento muy importante en relación con la relación con la UE. El cierre formal y político de las negociaciones es un hito muy importante. Yo sé que para la gente que está escuchando parece un tecnicismo, pero es un hito muy importante, considerando que estamos desde el 2017 en este proceso y el llegar a un cierre de negociaciones y a un acuerdo político respecto del acuerdo es parte de los hitos respecto de los tratados de libre comercio", destacó Urrejola.
La canciller agregó que "el objetivo es que ambas partes trabajamos muy fuertemente para poder firmar ya formalmente el acuerdo a finales del próximo año".
"Algunos de los beneficios se van a empezar a ver independientemente de la ratificación del acuerdo. Los beneficios en relación al diálogo político siempre han sido muy importantes con la UE y el hecho de haber llegado a este acuerdo hoy creo que va a robustecer ese diálogo político. De hecho, era uno de los temas que estábamos conversando", enfatizó la ministra.
Por su parte, Borrell afirmó que este acuerdo de modernización "tiene una importancia política que va más allá del comercio. Tiene una importancia histórica porque Chile fue el primer país sudamericano que firmó un acuerdo de asociación con la Unión Europea".
"Han pasado 20 años y el mundo ha cambiado desde entonces y ahora, con este acuerdo al que denominamos precisamente por eso avanzado, tiene que abrir para Europa y para Chile nuevas oportunidades, tiene que profundizar en el diálogo político, tiene ciertamente que impulsar la inversión generando beneficios económicos para los europeos y para los chilenos. Pero sobre todo tiene que extender y ampliar la relación entre nuestras sociedades, entre nuestra comunidad científica, entre los sectores económicos, públicos y privados", añadió el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores.
Beneficios de la actualización
En virtud del texto pactado, el 99,9% de las exportaciones de la UE a Chile estarán libres de aranceles, mientras que nuestro país obtendrá la liberalización total del 96,5% de los productos que envíe al club comunitario.
La UE concederá también cuotas adicionales de importación a varias categorías de carne chilena: 18.000 toneladas más en el caso de la carne de pollo, 9.000 toneladas de carne de cerdo, 4.000 toneladas de carne de ovino y 2.000 toneladas de carne de vacuno.
Asimismo, Chile podrá exportar a la UE 11.000 toneladas de aceite de oliva.
Por otra parte, la UE garantizó mejor acceso de productos lácteos europeos a Chile, así como la protección de algunas denominaciones de origen de queso y vino europeos.
Otro elemento de importancia para el lado europeo durante las negociaciones fue mejorar el acceso a materias primas "clave" para la transición ecológica, como el litio o el cobre producido en Chile.
"Novedoso" capítulo sobre género
A su turno, el subsecretario de Relaciones Económicas Internacionales, José Miguel Ahumada, relevó que "tenemos un capítulo de género y uno de los puntos fundamentales es que se protege y se busca ampliar la cooperación en los desafíos de la igualdad de género".
"Es un tema bastante importante en nuestra política y uno de los temas más novedosos del propio acuerdo, en tanto que es la primera vez que la Unión Europea incluye un capítulo de estas características con algún socio comercial en algún acuerdo de modernización", recalcó.
El siguiente paso es que el texto se revisará en cada país del bloque de los Veintisiete, a fin de ser armonizado tanto en derecho como en sus idiomas, por lo que se estima que la firma pueda concretarse en el segundo semestre 2023. Luego de ello, deberá ser ratificado por los Estados y aprobado en sus parlamentos.