Jueza fue condenada a cuatro años de libertad vigilada por datear a su hijastro en causa de tráfico de drogas

El Tribunal Oral de Coyhaique condenó a cuatro años de libertad vigilada intensiva a la magistrada de esa ciudad, Cecilia Urbina Pinto, tras considerarla culpable de dos delitos de revelación de secreto.

La magistrada, quien está suspendida del cargo, fue condenada por entregar información a su cónyuge sobre una investigación reservada de tráfico de drogas en la que estaba involucrado su hijastro, según acreditó la justicia.

La jueza Javiera Alarcón, quien estuvo a cargo de la lectura de la sentencia, declaró que "conforme al artículo 15 bis de la Ley 18.216 se sustituye la pena privativa de libertad impuesta por la pena de libertad vigilada intensiva por el lapso de cuatro años, debiendo mantener residencia en un lugar determinado, a propuesta de la misma, someterse a la vigilancia y orientación permanente de un delegado durante el tiempo de la pena".

Urbina además tendrá prohibido "acceder al tribunal de Garantía de Coyhaique y a los sistemas informáticos del Poder Judicial".

Desde el Ministerio Público, la fiscal María Inés Núñez detalló que esperarán el fallo para su revisión, no descartando presentar una apelación.

"Nosotros estamos esperando que se nos notifique la sentencia en forma íntegra para revisarla y poder determinar si vamos o no a deducir recursos en contra de la sentencia. Esta sentencia va a ser cumplida en libertad, toda vez que así la ley lo dispone", explicó la persecutora.

El tribunal acusó también al cónyuge de la jueza, Jorge Cárceres, quien también fue declarado culpable por revelación de secreto amparados en la Ley 20.000 de drogas.

Para Cáceres, el Ministerio Público solicitaba una condena de tres años, lo que fue acogido por el Tribunal, y la deberá cumplir bajo remisión condicional ante Gendarmería.

En tanto, Urbina fue absuelta del delito de prevaricación.