EEUU exige la liberación del obispo nicaragüense que se negó a ser desterrado
El Departamento de Estado condenó además que se le haya retirado la ciudadanía al obispo y a los 222 presos políticos nicaragüenses.
"El obispo Rolando Álvarez está injustamente encarcelado y seguiremos presionando para su liberación", expresó.
Estados Unidos exigió este sábado a Nicaragua la liberación del obispo Rolando José Álvarez Lagos, quien fue condenado a 26 años de prisión tras negarse a ser desterrado por la dictadura de Daniel Ortega a territorio estadounidense.
Un portavoz del Departamento de Estado condenó además en declaraciones a EFE que se le haya retirado la ciudadanía al obispo y a los 222 presos políticos nicaragüenses que sí aceptaron ser expulsados del país a cambio de su liberación.
"El obispo Rolando Álvarez está injustamente encarcelado y seguiremos presionando para su liberación", expresó la misma fuente.
El Gobierno de Joe Biden "condena el despojo de la ciudadanía de monseñor Álvarez y de los hasta ahora presos políticos", añadió el portavoz de la diplomacia estadounidense.
"Dicha medida viola los derechos fundamentales de estas personas", reprochó.
El pasado jueves, Nicaragua excarceló y expulsó del país a 222 presos políticos, que fueron trasladados a Washington en un avión enviado por el Gobierno estadounidense.
Dos presos se negaron a abandonar el país, entre ellos el obispo, quien como consecuencia fue sentenciado a 26 años de prisión, despojado de su ciudadanía y trasladado de su arresto domiciliario a la cárcel Modelo.
Los 222 nicaragüenses que llegaron a Estados Unidos, entre los que hay prominentes figuras de la oposición nicaragüense, recibieron un permiso humanitario para permanecer en territorio estadounidense durante dos años, aunque varios analizan la oferta del Gobierno de España para recibir la nacionalidad española.
OBISPOS CHILENOS ESTIMAN QUE LA CONDENA ATENTA CONTRA DDHH
Posteriormente, el Comité Permanente del Episcopado chileno repudió la condena contra Álvarez, y aseguraron que con ello el régimen de Daniel Ortega suma una nueva violación contra los derechos humanos.
En un comunicado, los obispos chilenos aseguraron que la represalia contra el obispo de Matagalpa y administrador apostólico de Estelí, que se negó a embarcar en un vuelo de expulsión a Estados Unidos de 222 opositores, es "un procedimiento a todas luces injusto, arbitrario y desproporcionado".
Este ataque "se suma a otras múltiples medidas aplicadas en los últimos meses contra fieles y organismos católicos: expulsión del Nuncio apostólico, expulsión de las religiosas Misioneras de la Caridad, destierro y encarcelamiento de sacerdotes, cierre de medios de comunicación", advirtieron.
"Todo esto en medio de diversas restricciones a las libertades civiles y políticas y el acallamiento de las voces disidentes del régimen, que se ha expresado el día de ayer en el destierro de más de 200 nicaragüenses de su país. Atenta contra los derechos humanos, la dignidad esencial de la persona y la libertad religiosa", agregaron.