Clínica veterinaria deberá pagar cuatro millones de pesos por extravío de un gato
"Nicolás" desapareció en medio de una estadía, provocando "un gran impacto emocional y físico" en su ama, una adulta mayor divorciada que vive sola.
La Justicia resaltó que "al tratarse de un ser vivo y sintiente, su calidad es superior a un mero bien patrimonial".
La afectada se querelló y demandó a la clínica, acusando "poca empatía" al minimizar la pérdida y cosificar a "Nicolás".
La Corte de Apelaciones de Temuco ratificó, de manera unánime, un fallo del Tercer Juzgado de Policía Local de la ciudad que condenó a la Clínica Veterinaria Edén a indemnizar con 2,2 millones de pesos a la dueña de un gato que se extravió durante una estadía.
Según consta en el expediente del caso (ver archivo adjunto), "Nicolás" se perdió el 19 de enero de 2021. Tras ello, su dueña, una mujer de 71 años llamada María Elcira Quiroz, presentó una querella y una demanda de indemnización de perjuicios.
En el escrito se indica que el felino era una parte importante en su vida, pues es una persona con movilidad reducida y vive sola hace una década, luego de divorciarse tras 34 años de convivencia.
Se añade que el incidente le "provocó un gran impacto emocional y físico, pues Nicolás era su única compañía". Un perito que la examinó acreditó "trastorno de estrés agudo y crisis de pánico".
Además, se acusa "poca empatía" de la Clínica, que "minimizó la pérdida del gato, (...) lo cosificaron sin entender el significado que tenía para la señora María Elcira"; se refirieron a él "como a un objeto" e incluso tuvieron un "trato cortante", una actitud "agresiva y hostil" que hizo a la adulta mayor sentirse culpable por lo ocurrido.
"SERES DIGNOS DE PROTECCIÓN Y CUIDADO"
El fallo de primera instancia, pronunciado por la magistrada Michele Caminondo y confirmado por el tribunal de alzada (ver archivo adjunto), da por establecido que "el resguardo no fue completo para con la consumidora, afectando el mínimo estándar profesional respecto a la información, seguridad y exigencias de buen servicio".
Adicionalmente, "el bien jurídico protegido se eleva aún más al tratarse de un ser vivo y sintiente, cuya calidad es superior a un mero bien patrimonial". Las mascotas "son seres dignos de protección y cuidado", enfatiza.
En definitiva, la Clínica -que también operaba como hotel para animales de compañía- deberá pagar a la dueña de "Nicolás" dos millones de pesos por concepto de moral, y 227 mil 250 pesos por daño emergente.
Adicionalmente, deberá cancelar una multa de 35 UTM (2,1 millones de pesos) a beneficio fiscal. En total, el desembolso será de 4,3 millones.