Funcionario de la PDI fue detenido portando armamento de guerra en San Bernardo
La situación fue alertada debido a que el sujeto se movilizaba en una camioneta con sus placas patente ocultas.
Portaba un fusil y una gran cantidad de munición al momento de su detención.
Un funcionario de la Policía de Investigaciones fue detenido durante la noche del viernes tras ser sorprendido por personal de Carabineros portando armamento de guerra en la comuna de San Bernardo.
El hecho comenzó cuando personal de la policía uniformada se percató de una camioneta que transitaba con sus placas patentes de forma oculta.
Al intentar fiscalizar dicho vehículo, el conductor escapó del lugar, originándose una persecución policial por la comuna que terminó con la detención del sujeto.
Al momento de revisar el vehículo, se percataron que el oficial de la PDI portaba un fusil Mauser, además de 200 municiones de guerra, hecho que se encuentra prohibido por ley.
Desde la PDI, en tanto, informó en un comunicado que el funcionario se encontraba con licencia psicológica, marco en el que la policía evalúa acciones administrativas por conductas impropias alejadas los valores institucionales.
Según peritajes preliminares realizados por Carabineros, el arma incautada estaba en condiciones para el disparo, mientras que en el domicilio del detenido se encontró también otro tipo de municiones.
PRISIÓN PREVENTIVA PARA EL DETENIDO
El fiscal Sergio Soto, jefe de la Unidad de Análisis Criminal y Focos Criminales Occidente, expuso que "el subcomisario fue detenido el día de ayer, en momentos en que fue sorprendido conduciendo un vehículo con las placas patentes oculta y además manteniendo en su interior un fusil y municiones de guerra".
En la audiencia de formalización, "el Tribunal dio por establecido los delitos de porte ilegal de arma de fuego prohibida de guerra, como además también de municiones; y, por cierto, el delito de conducir con placa patente oculta", detalló el persecutor.
La Fiscalía acusó también que el número de serie del fusil estaba borrado, lo cual hace imposible rastrear el origen de esta arma.
El Juzgado de Garantía decretó la prisión preventiva contra el detective, bajo el argumento de que representa un peligro para la sociedad, y do un plazo de 80 días para la investigación.
"El hecho más grave es el transporte de esta arma prohibida, junto con la gran cantidad de munición y el hecho de que además en el domicilio computado se encuentran nuevas municiones. Se estima que la libertad de este es un peligro para la seguridad de la sociedad, por lo que se decretó la medida cautelar de prisión preventiva", sostuvo el tribunal.
El policía deberá cumplir la prisión en el centro penitenciario Santiago Uno.