"Gatilló la modernización del sistema": Lecciones a 13 años del 27F en el monitoreo sismológico
El 27 de febrero del 2010 un terremoto de magnitud 8,8 y un posterior tsunami azotaron a la zona centro sur de Chile, dejando 525 personas muertas, alrededor de 500 mil viviendas dañadas y 2 millones de damnificados. A 13 años de la catástrofe, Sergio Barrientos, director del Centro Sismológico Nacional, relevó en El Diario de Cooperativa que "gatilló la modernización de todos los sistemas de monitoreo, tanto sismológicos como de tsunamis, que corresponde al SHOA; la institucionalidad ha cambiado enormemente respecto de los que era previo al 2010". Recordó que, "lamentablemente, el sistema sismológico de observación que teníamos era razonable, pero no tan bueno como el que existe hoy", ya que "cada vez que podemos entender de mejor manera cómo se manifiestan los terremotos en la superficie, podemos cuantificar de mejor manera el peligro y producir aquellas medidas de mitigación adecuadas". Por ello, "si hubiésemos tenido el sistema de observación que tenemos ahora, antes del 2010, hubiera sido extraordinario para Chile y el mundo", concluyó.