Previo a maniobras militares surcoreanas, Pionyang aprobó "medidas disuasorias"
La Comisión Militar Central, encabezada por Kim Jong-Un, prometió dar "una respuesta sin precedentes" a estos ensayos, que comenzarán el lunes.
En conjunto con EEUU, Corea del Sur desarrollará una serie de ejercicios "a gran escala" hasta el 23 de marzo.
La última vez que los aliados realizaron maniobras de esta envergadura el pasado noviembre, Corea del Norte disparó en respuesta más de 30 misiles en tres días.
El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, presidió una reunión de la Comisión Militar Central, en la que se debatieron y aprobaron "medidas disuasorias" para hacer frente a las grandes maniobras militares que Corea del Sur y EEUU inician el lunes.
En el encuentro se adoptaron "pasos prácticos importantes para hacer un uso más efectivo, contundente y ofensivo de laa medidas disuasorias del país para hacer frente a la situación actual en la que las provocaciones de guerra de EEUU y Corea del Sur se están acercando a la línea roja", según informó hoy la agencia estatal KCNA.
La junta "quedará registrada en la historia del país como una reunión significativa que subrayó aún más el carácter revolucionario y la naturaleza del Ejército Popular de Corea, del Partido y del pueblo", añade el texto.
El encuentro del órgano militar norcoreano se produce un día antes de que arranquen en el Sur las maniobras conjuntas de primavera de Seúl y Washington Freedom shield, que incluyen una serie de ejercicios sobre el terreno "a gran escala" y que durarán hasta el próximo 23 de marzo.
Pionyang suele considerar estas maniobras como un ensayo para invadir su territorio y en esta ocasión ha prometido dar "una respuesta sin precedentes".
La última vez que los aliados realizaron maniobras de esta envergadura el pasado noviembre, Corea del Norte disparó en respuesta más de 30 misiles de distinto tipo -uno de ellos de alcance intercontinental- en apenas tres días.
La península vive un nivel histórico de tensión después de un 2022 en el que Pionyang realizó un número récord de pruebas de armas, y en el que los aliados volvieron a ejecutar grandes maniobras y a desplegar activos estratégicos estadounidenses en la región.