EEUU abre una embajada en Tonga para contrarrestar la influencia de China en el Pacífico
"Valoramos nuestra historia común, cuyas relaciones se remontan a 1886 y al establecimiento de relaciones diplomáticas en 1972", destacó el Departamento de Estado.
Dos tercios de la deuda externa de la remota nación insular, que en total roza los 200 millones de dólares, son al Banco de Exportación e Importación de China.
Estados Unidos abrió este miércoles una nueva embajada en Nuku'alofa, la capital de Tonga, como parte de su estrategia diplomática para contrarrestar la creciente influencia de China en la estratégica región del Pacífico.
"Esta inauguración simboliza la renovación de nuestra relación y subraya la fuerza de nuestro compromiso con nuestras relaciones bilaterales, con el pueblo de Tonga y con nuestras asociaciones en la región del Indopacífico", publica hoy en un comunicado el Departamento de Estado estadounidense.
La apertura de la embajada en Tonga era una de las promesas que hizo la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, cuando anunció durante un discurso virtual en la pasada cumbre de líderes del Foro de las Islas del Pacífico (PIF) -celebrada en Fiyi en julio de 2022- que su país triplicaría la ayuda a la región.
"Valoramos nuestra historia común con Tonga, cuyas relaciones se remontan a 1886 y al establecimiento de relaciones diplomáticas en 1972", agregó al comunicado al referirse a esa remota nación insular de 105.000 habitantes.
Tonga -que fue golpeada en enero del 2022 por un tsunami provocado por la erupción de un volcán, que causó importantes daños en sus infraestructuras y dejó tres muertos- tiene una deuda externa de 195 millones de dólares (177,5 millones de euro), casi un 36 % de su PIB, de los que dos tercios son al Banco de Exportación e Importación de China, según publicó en junio del año pasado el medio The Guardian.
Esta inauguración se da después de que Estados Unidos reabriera a principios de febrero su embajada en Islas Salomón, tras unas tres décadas de ausencia en esa nación del Pacífico.
La otrora región olvidada del Pacífico, que reclama acciones contra la crisis climática, cobró protagonismo geopolítico después de que China firmara en abril de 2022 un pacto de seguridad con las Islas Salomón, que fue negociado de forma opaca.
El pacto -que incluye el envío de las fuerzas de seguridad chinas a petición de Honiara, tal y como lo hace con Australia y Nueva Zelanda- generó temores en la región de que China también establezca bases navales en las Salomón -algo que sus gobiernos han negado- y que la creciente influencia de Pekín perjudique a naciones insulares que tienen alianzas con Taiwán.
Asimismo, a mediados del año pasado, el por entonces ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, realizó una gira por el Pacífico para sellar un acuerdo regional de seguridad y cooperación con diez naciones del Pacífico, entre ellos Kiribati, Samoa, Tonga y Vanuatu, pero no lo consiguió cerrar.