Alumnos de la Universidad de Aysén llevan una semana en paro

Hace una semana, el 15 de mayo, los estudiantes de la Universidad de Aysén iniciaron un paro en demanda de mejoras en las condiciones en que desarrollan su formación.

A la movilización están adheridos los alumnos de las ocho carreras de la casa de estudios, que inició funciones en marzo de 2017: Agronomía, Ingeniería Forestal, Psicología, Trabajo Social, Ingeniería Civil Industrial, Ingeniería Civil Informática, Obstetricia y Enfermería.

Los jóvenes entregaron un petitorio de 10 páginas a la rectora, Natacha Pino; al Consejo Superior y al Senado Universitario, en el que detallan reivindicaciones "transversales a todo el estamento estudiantil", con varias solicitudes "que se vienen demandando desde los inicios de esta casa de estudio".

En materia de becas, exigen que los beneficios sean concedidos en tiempo y forma; en transporte solicitan contar con movilización acorde a la geografía regional, considerando que Aysén es la tercera región más extensa en territorio del país (ver archivo adjunto).

A pesar de que la Ley que creó la Universidad de Aysén en 2015, en el Gobierno de Michelle Bachelet, contemplaba recursos por 9.000 millones de pesos para construir una casa de estudios, esos recursos aún no se ejecutan y los alumnos estudian en edificios arrendados. Actualmente son tres sedes y parte de la exigencia es mejorar los espacios comunes, bibliotecas y comedores, entre otros.

Otro punto se da en materia de inclusión, exigiendo la capacitación del cuerpo docente y alumnos respecto a las personas neurodivergentes, además de habilitar las instalaciones con accesos inclusivos.

MARCHARÁN ESTE MARTES

La Universidad de Aysén entregó una primera respuesta al petitorio, pero la movilización continúa y para este martes existe una convocatoria a marcha desde el Campus Lillo.

Las autoridades del plantel no quisieron emitir declaraciones para "no entorpecer" el proceso de diálogo con los estudiantes.