Chile presentó nuevo dinosaurio pico de pato que vivió hace 72 millones de años en el extremo sur

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Gonkoken nanoi es el nombre de la especie, que oscilaba entre los 3,5 a 4 metros de largo y que podría haber alcanzado hasta una tonelada de peso.

El hallazgo reveló también que la Patagonia chilena fue un refugio para estas formas primitivas de hadrosaurios.

 Cedida/U. de Chile

La investigación permitió, además, reconstruir el esqueleto completo de este verdadero tesoro evolutivo.

Una investigación nacional descubrió una nueva especie de dinosaurio correspondiente a un linaje ancestral de los hadrosaurios, grupo conocido también como dinosaurios pico de pato, que vivió hace 72 millones de años en el extremo sur del país.

Fue el 2013 cuando una expedición del Instituto Antártico Chileno (INACH), liderada por su actual director, el doctor Marcelo Leppe, encontró fragmentos de huesos amarillentos en el fondo de una ladera en el sector del Valle del Río de Las Chinas, zona cercana a las Torres del Paine (en la Patagonia chilena) que ha sido epicentro de importantes hallazgos paleontológicos en los últimos años.

Este fue el comienzo de una intensa investigación a cargo de la Red Paleontológica de la Universidad de Chile que, tras casi una década de trabajo, no solo logró identificar a una nueva especie de dinosaurio, sino también reconstruir digitalmente la totalidad de su esqueleto y abrir el debate respecto al enigma evolutivo que su descubrimiento entraña.

Gonkoken nanoi es el nombre de esta nueva especie de dinosaurio, cuyo estudio fue dado a conocer este viernes 16 de junio por la revista Science Advances, un trabajo en el que también participaron otros investigadores de la U. de Chile, del INACH y del Museo Nacional de Historia Natural.

El hallazgo corresponde a un animal herbívoro que vivió hace 72 millones de años en el extremo sur de Chile, el cual está asociado a un linaje ancestral de los hadrosaurios (grupo conocido también como dinosaurios pico de pato) del que no se tenía registro en todo el Hemisferio Sur. Se estima que sus dimensiones oscilaban entre los 3,5 a 4 metros de largo y que podría haber alcanzado hasta una tonelada de peso.

"Estos eran dinosaurios de apariencia esbelta, que podían adoptar fácilmente tanto una postura bípeda como cuadrúpeda para alcanzar vegetación en altura y a ras de suelo. Tenían grandes picos aplanados en el extremo, semejantes a un pato (de ahí su nombre popular), pero con bordes más cortantes y enormes baterías dentales en sus mandíbulas, formadas por numerosas corridas de cientos de dientes con las cuales podían moler, triturar y cortar prácticamente cualquier material vegetal, incluyendo madera. Poseían, además, comportamiento social, y cuidaban de sus crías", explicó Alexander Vargas, académico de la Facultad de Ciencias de la U. de Chile, director de la Red Paleontológica de este plantel y uno de los autores del estudio.

DETALLES DEL NOMBRE

La denominación "Gonkoken" tiene su origen en la lengua Aónikenk (Tehuelches del sur), pueblo originario que habitó esta zona hasta fines del siglo XIX.

"Al igual que todos los hadrosaurios conocidos, Gonkoken nanoi poseía un pico similar al de los patos, por lo que quisimos que su nombre aludiera a esa característica. Por ello, decidimos usar las palabras 'gon' (parecido o similar a) y 'koken' (pato silvestre o cisne). De esta manera, se creó el nombre Gonkoken, que significa 'parecido al pato silvestre o al cisne'", detalló Jhonatan Alarcón, investigador de la Red Paleontológica de la U. de Chile y autor principal del estudio.

En esta línea, el experto afirmó que "en cuanto al término 'nanoi', se utilizó para reconocer a Mario 'nano' Ulloa, antiguo puestero de la Estancia Las Chinas, quién fue de gran apoyo logístico en los primeros descubrimientos de animales y plantas fósiles en esta zona".

ROMPECABEZAS EN CONSTRUCCIÓN

El lugar del hallazgo contiene numerosos huesos desarticulados en excelente estado de preservación, afirma Alarcón.

Estas piezas, que pertenecen tanto a ejemplares adultos como a juveniles, han podido recuperarse progresivamente mediante las expediciones que realiza cada año en febrero el INACH junto a investigadores de la Red Paleontológica de la U. de Chile y de otras instituciones, un trabajo que ha permitido nutrir de evidencia el estudio de esta nueva especie de dinosaurio, la quinta descubierta en Chile luego de Chilesaurus diegosuarezi, Atacamatitan chilensis, Arackar licanantay y Stegouros elengassen, este último, además, encontrado en la misma zona que Gonkoken nanoi.

"La extracción y preparación del material para su estudio ya fue bastante difícil. La primera dificultad estuvo en la excavación en sí, porque uno sacaba un hueso y aparecía otro por debajo. Entonces, fue muy difícil extraer los huesos sin perder información y sin dañar otros elementos óseos", señala Alarcón, quien destaca que esta labor ha permitido recuperar más de un centenar de piezas en total.

El trabajo en laboratorio prosiguió con una cuidadosa limpieza y clasificación de estos fósiles para su estudio, trabajo que continúa en proceso con piezas nuevas y que seguramente sumará nueva información a futuro.

Para el estudio, aclara, fueron ocupadas aquellas piezas más representativas o informativas de la nueva especie.

Vértebras, huesos del cráneo tales como mandíbulas y maxilares, elementos de las extremidades y costillas, entre muchos otros huesos, fueron sometidos además a tomografías computarizadas y las piezas faltantes pudieron ser reconstruidas digitalmente gracias a la investigación desarrollada por el equipo. Todo este trabajo permitió elaborar el esqueleto completo de un Gonkoken nanoi en formato digital.

Actualmente, el equipo está en la búsqueda de recursos que permitan imprimir este esqueleto en 3D en tamaño real para su exhibición al público.

¿CÓMO ERA EL GONKOKEN NANOI?

  • Estatura: Entre 3,5 a 4 metros de largo.
  • Peso: Entre 600-1000 kg
  • Comida: herbívoro
  • Características propias: Grandes picos aplanados en el extremo semejantes a un pato. Caracterizados por un comportamiento gregario y el cuidado de sus crías.