EEUU: Psiquiatras acusan vínculo falaz entre tiroteos y problemas mentales

Publicado:
- Periodista Digital:
EFE

"Evita que hablemos del problema serio que tiene el país con la violencia y además añade un estigma", fustigó la American Psychiatric Association.

Según el FBI, sólo el 25% de los atacantes fue diagnosticado con alguna enfermedad previo a tiroteos registrados entre el 2000 y el 2013.

 EFE (referencial)

De acuerdo a The Educational Fund to Stop Gun Violence, las personas con enfermedades mentales "tienen más probabilidades de ser víctimas que perpetradores" de estos ataques.

En los últimos meses, numerosos políticos republicanos en Estados Unidos han extendido la idea de que los tiroteos masivos -que se producen cada vez con más frecuencia- están relacionados con la salud mental, una afirmación que según los psiquiatras es falsa.

"Esto evita que hablemos del problema serio que tiene Estados Unidos con la violencia, crea una distracción, y además añade un estigma a las personas con problemas de salud mental", plantea EFE Héctor Colon-Rivera, psiquiatra de la American Psychiatric Association.

Así, en lugar de hablar de "tratamientos y de ayudar a estas personas", lo que se logra con este tipo de asociaciones es "aumentar sus miedos a hablar y contar lo que les pasa".

Según la organización Gun Violence Archive, un proyecto sin fines de lucro que sigue la violencia armada en EEUU, en lo que va de año se han producido más de 370 tiroteos masivos, los que dejaron cuatro víctimas, sean muertos o heridos, sin incluir al autor del ataque.

"La violencia con armas es un problema gigante de salud pública y la salud mental es otro problema gigante de salud pública. La vinculación entre ellas es bien débil", agrega Colon-Rivera.

MÁS PROBABILIDAD DE SER VÍCTIMAS QUE PERPETRADORES

Luchar contra esta falsa asociación es uno de los objetivos de la organización The Educational Fund to Stop Gun Violence, que en un informe publicado en su página web asegura que "es un error común pensar que las personas que viven con una enfermedad mental son responsables de la violencia armada".

"En realidad, la mayoría de las personas con enfermedades mentales no ejercen violencia contra los demás (...) y tienen más probabilidades de ser víctimas que perpetradores", afirma la organización en el estudio.

La organización recuerda que uno de cada cinco estadounidenses tiene un problema mental diagnosticado, tasa similar a las de otros países, mientras que sus números de violencia armada son mucho más altos.

Esta falsa asociación, apunta por su parte la organización National Alliance of Mental Illness, es un "golpe en el estómago" para las personas que tienen problemas de salud mental.

"La gran mayoría de las personas con enfermedades mentales no son violentas, nunca se volverán violentas, y las enfermedades mentales no son responsables en la mayoría de los casos de violencia con armas de fuego", afirma.

SÓLO EL 25% DE LOS ATACANTES HA SIDO DIAGNOSTICADO

Según un informe publicado por el FBI en 2018, en el que se examinó el comportamiento previo al ataque de los perpetradores de tiroteos masivos más cruentos entre 2000 y 2013, sólo el 25% de ellos tenía problemas mentales diagnosticados.

La institución asegura que hay una "común pero errónea inclinación a suponer que cualquiera que cometa el acto de disparar debe ser de facto un enfermo mental".

"La salud mental se usa con demasiada frecuencia como chivo expiatorio o como una respuesta muy simple al problema, cuando no lo es", complementa a EFE la directora general de Texas Gun Sense, Nicole Golden.

Al pertenecer a uno de los estados más laxos en el control de armas, advirtió que el poder de los grupos de presión es enorme: "Son muy activos, están constantemente en el capitolio hablando con legisladores y tienen mucha influencia para bloquear nuestros esfuerzos por que se aprueben leyes con sentido común", explica, por lo que llaman al uso responsable de estos elementos.

Por lo mismo, promueven -por ejemplo- la prohibición a menores de 21 años de comprar armas de asalto, la verificación universal de antecedentes para la venta y las conocidas como "leyes bandera roja", que "separan temporalmente a una persona de su arma de fuego".