Zelenski sobre posibilidad de elecciones en plena guerra: "No es tiempo"
El ex asesor del presidente, Oleksí Arestovich, pidió que no se aplazaran las elecciones, a las que pretende presentarse.
Considerando el conflicto con Rusia, el mandatario calificó esta postura como "frívola" y "totalmente irresponsable".
La máxima autoridad de Ucrania ha debido afrontar serias críticas por su administración en el contexto de la guerra contra Rusia
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, manifestó su postura en contra de llevar a cabo las elecciones -previstas para el próximo año- en el país mientras esté vigente el conflicto armado con Rusia.
Este lunes, Zelenski -cuyo mandato termina el 31 de marzo de 2024- se dirigió a la nación señalando que "creo que ahora no es tiempo para elecciones".
De igual forma, solicitó a la población evitar "todo lo que suponga división política" y concentrar la atención en la defensa y la "batalla" que definiría "el destino del país y de la gente".
En esta misma línea, el presidente hizo un llamado a no avivar los conflictos internos o caer en el pesimismo, argumentando que ello solo resulta conveniente para Rusia.
"Es necesario poner fin a esto o a la disputa política y seguir trabajando en unidad. Entonces el Estado tiene estructuras capaces de ponerle fin y dar a la sociedad todas las respuestas necesarias para que no haya lugar a conflictos y a los juegos de otros contra Ucrania", agregó Zelenski.
Estas declaraciones de la máxima autoridad ucraniana llegan a días de que su otrora asesor, Oleksí Arestovich, quien ha criticado severamente a la administración de Zelenski, pidiera que no se aplacen los comicios del próximo año, anunciando su intención de presentarse a ellos.
Así las cosas, durante su discurso de este lunes, el presidente del país europeo calificó esta postura como algo "frívolo" y "totalmente irresponsable" en "tiempo de guerra".
Cabe destacar, las autoridades militares y de seguridad ucranianas advirtieron previamente sobre el desafío que representaría garantizar la seguridad de la población durante una eventual jornada electoral en plena guerra, dando la oportunidad de votar a soldados, refugiados y desplazados al interior del país.
La idea de aplazar los comicios, tal como se contempla en la ley marcial vigente desde que estalló el conflicto con Rusia, se contextualizan, además, a días que Valeri Zaluzhni, jefe del Ejército, admitiera que se habían cometido errores en la estrategia militar y asumiera un estancamiento en el frente de combate.